CANNIBAL CORPSE: 32 Descuartizados al nacer 🇺🇸 DEATH METAL

Originarios de Tampa, Florida (EEUU), hace exactamente 32 años, la banda de Death Metal Deicide lanzó su segundo álbum, nada más y nada menos que Legion.
Dicho álbum los consolidó como uno de los pesos pesados del género a principios de los años 90.

Hace cuestión de 32 años, un 30 de junio de 1991, Cannibal Corpse lanzó su segundo álbum de estudio. Se trata nada más y nada menos que del salvaje y enfermizo Butchered at Birth.
Originarios de Buffalo, y considerada al día de hoy uno de los pesos pesados del Death Metal lanzó el mencionado álbum bajo el sello Metal Blade Records igual que su predecesor Eaten back to life, y nuevamente bajo la producción del legendario Scott Burns y grabándose en el archiconocido Morrisound Studios en Tampa, Florida.

Si el insano predecesor ya era agresivo, sumamente visceral y podrido, en Butchered at Birth se vuelve todo aún más enfermizo, y si Eaten Back to life tenía tintes de Thrash Metal totalmente podridos, en el presente la banda apuesta por aún más brutalidad y por consolidar su sonido, aún más agresivo, mejor producido, la voz de Chris Barnes suena aún más potente y no escatima en extrema violencia gráfica a la hora de escribir sus letras, de hecho jamás ha escatimado durante su estadía en Cannibal Corpse, brindándonos las más retorcidas letras que ha tenido la banda, incluso si uno las imagina gráficamente y es de estómago sensible, fácilmente puede quedar con el estómago revuelto.

No toda carátula de un álbum refleja en su totalidad el contenido de la obra, sin embargo, el arte de Vincent Locke, claramente demuestra lo que habrá, al encontrarnos con dos zombies con sus delantales carneando a una mujer sobre una sábana y extrayendo el ensangrentado fruto de su vientre y vemos un montón de bebés desollados colgados, decapitados, con sus extremidades mutiladas o bien plenamente podridos colgados en un techo. Algo así de explicito nos está dejando en claro que es lo que contiene el álbum, y a ese nivel irán las letras, en las cuales Chris Barnes si hay algo que no hace, es adornarles con tintes poéticos, va directo al grano de la forma más gráfica y enfermiza, si alguno se viera molestado por las mismas, pues “a tomar por el ****”. No por nada el álbum lamentablemente, ha sido víctima de grandes censuras, como en Alemania, donde estuvo prohibido al igual que interpretar sus temas hasta el año 2006. Toda esta repudiable censura, conllevó a que debiera lanzarse una versión con la carátula censurada, la cual venía con el nombre del disco escrito en tinta roja sobre fondo blanco.

Esta obra, está cargada de varios clásicos de la banda, como Meat Hook Sodomy, Gutted, Covered with Sores, Vomit the Soul, en donde contaron con la colaboración de Glen Benton (Deicide) en las voces, o Rancid Amputation. A lo largo de los 36 minutos que dura la obra, encontramos a Jack Owen y Bob Rusay sacando toda la brutalidad de sus 6 cuerdas con sus retorcidos riffs, mientras que Paul Mazurkiewicz reparte blast beats a diestra y siniestra con su batería, no sin ser respaldados por el magnífico bajo de Alex Webster, siendo estos últimos los miembros originales que permanecen en la banda al día de hoy; y por más que posteriormente la banda fuera volviéndose más técnica en su sonido, lo realizado en Butchered at Birth queda en claro que no es ninguna novatada.

Con su sonido totalmente explosivo, riffs veloces y enfermizos, una batería totalmente despiadada y la putrefacta voz de Barnes, hacen de esta obra una muestra de un primigenio sonido de un Brutal Death Metal, algo de lo cual suelen ser atribuidos como sus creadores.

El disco da comienzo con ruidosas guitarras que sirven a modo de introducción, Meat Hook Sodomy marca el inicio de la carnicería cuando empieza a sonar la batería de Mazurkiewicz en conjunto con los riffs de Owen y Rusay, apreciando en forma más grave, la voz de Barnes, dejando en claro el camino que tomará el resto de la obra, con una sumamente retorcida letra, que en una de sus partes a modo de ejemplo dice “Sodomizing living beings with my utensils. Stabbing on your life, stripped of all your skin.” (Sodomizando seres vivos con mis utensilios, apuñalando tu vida, despojado de toda tu piel).

Le sigue Gutted, con un potente y contundente riff dotado de una base rítmica que acelera una vez Barnes hablando sobre destripar inocentes infantes, no solo vemos en su letra descuartizamientos detallados en forma absolutamente gráfica, sino también violencia sexual y referencias a la necrofilia con los niños asesinados “The entire body bleeding, the heart stops pumping. The child lying dead, just another gutted infant” (El cuerpo entero sangrando, el corazón deja de bombear. El niño yace muerto, solo otro infante destripado”). Basicamente, Barnes se adentra en una mente totalmente perturbada en la letra de la canción.


Los siguientes Living Dissection y Under the Rotted Flesh continuarán con al tonalidad cruda y visceral adoptada en los anteriores temas, sin dar respiro o piedad alguna con sus totalmente enfermizos riffs, y letras que rajan las tripas de todo aquel incauto sensible.
El álbum continúa con Covered with Sores, destilando agonía y maldad en partes iguales de la mano de Owen y Rusay, con una atmósfera asfixiante y malsana.

Luego Vomit the Soul, ya puede considerarse un tema más “Deicidezco”. De por sí, el para nada amigable Glen Benton presta su maligna voz en el presente tema, con Barnes dando una orientación más satánica a su lírica, donde Benton da su toque maligno al tema resaltando las partes blasfemas “Blessed by the Devil under inverted crosses,Religious ways, lies controlling minds” (Bendecido por el Diablo bajo las cruces invertidas, Caminos religiosos, mentiras controlando mentes).

De forma rápida y concisa es lanzado el tema que titula al salvaje álbum, Butchered at Birth, con una lírica que Barnes se encargará de que quede grabada en nuestras mentes de la manera más certera posible a base de sangre y vísceras “Meat from the unborn, the freshest kills. Chopped up children, bathing in blood.” (Carne de no nacidos, las matanzas mas frescas, niños picados, bañándose en sangre).
De forma distorsionada y sumamente violenta sigue Rancid Amputation, que suena sumamente machacante como si nos estuvieran amputando nuestras extremidades. Los intensos riffs y la salvaje batería preceden a un desquiciado solo de guitarra precedido por la malsana batería de Mazurkiewicz para dar final al tema.

Innards Decay, es el tema que dará final a la carnicería de la forma más salvaje con una adrenalínica dosis de riffs con la notable presencia del bajo de Webster desembocando en agónicos acordes, conteniendo afilados solos de parte de Owen y Rusay. Un salvaje y retorcido final para esta notable carnicería, considerada por muchos la mejor obra de Cannibal Corpse.
Butchered at birth es una obra que terminó de definir el sonido y la identidad de Cannibal Corpse, estableciendo el rumbo que seguirían posteriormente. Se trata de una indispensable obra del grupo neoyorquino, así como también un álbum indispensable de los días dorados del Death Metal a comienzos de los 90.

CURIOSIDADES Y DATOS DEL ALBUM:

-El CD fue producido por el mítico productor Scott Burns en Morrisound Studios.

-Fue lanzado por Metal Blade Records,

-Es considerado el trabajo preferido de la banda según el bajista Alex Webster

-Su venta estuvo prohibida en Alemania hasta Junio de 2006.

-En su edición censurada, se distribuyó con el disco envuelto en papel blanco de carnicería y el título con tinta roja.

-En la reedición de 2002, se incluye de Bonus track una versión en vivo de Covered With sores.

TRACKLIST:

Meat Hook Sodomy 05:49

Gutted 03:15

Living Dissection 04:00

Under the Rotted Flesh 05:04

Covered with Sores 03:17

Vomit the Soul 04:30

Butchered at Birth 02:44

Rancid Amputation 03:16

Innards Decay 04:37

Adrian Wolfsblut

Especialidades: Reviewer Géneros predilectos: Black Metal, Death metal Período de actividad: Marzo 2023-Presente Residencia: Uruguay Amante del Black y Death Metal como También coleccionista de discos, ya perdí al cuenta de cuantos tengo, solo se son tres cifras. También lector empedernido y de la misma forma con buenas series, el cine de terror y videojuegos.