WITHERING SCORN – Prophets Of Demise (Album Review)

  • 🎸 Heavy Metal/Thrash Metal
  • 🌎 Estados Unidos
  • 💿 Frontiers Music
  • 📆 07 de Julio, 2023

Por Santino G. Barbas

El año 2020 marcó una suerte de quiebre en la época contemporánea, mientras el mundo se veía azotado por una pandemia global, los artistas vieron ciertamente una crisis en sus menesteres profesionales, explotando y evidenciando falencias en el negocio de la música. Mientras que ésta interpelaba como nunca antes a la industria, algunos jugadores de la escena planificaron y optaron por generar proyectos que, no solamente satisficiesen sus intereses artísticos, sino que también dieran frutos productivos tanto en el área económica como en lo que concierne a la propia dirección de sus carreras.

Withering Scorn se formó en ese 2020 por los hermanos canadienses Glen y Shawn Drover, quienes anteriormente formaron parte de Megadeth (y conjuntamente grabaron el álbum de estudio «United Abominations»), así como en su propio proyecto Eidolon. La pareja se ha unido una vez más para su última oferta musical y se les une Joe DiBiase, quien tocó con Fates Warning durante catorce años en múltiples discos y giras mundiales, y el vocalista alemán Henning Basse, quien supo ser parte de medianos proyectos como Metalium y Firewind.

La potente combinación de estos cuatro músicos increíblemente talentosos uniendo fuerzas ha dado lugar a un disco de Heavy Metal intransigente y anticipadamente esperado con el nombre de «Prophets Of Demise», con fecha de lanzamiento para el día 7 de julio de 2023, bajo el sello discográfico Frontiers Music. Plagado de una mixtura de estilos que van desde el Heavy Metal clásico, el Thrash Metal y algunos atisbos de Power Metal, «Prophets Of Demise» se posiciona como un fuerte candidato a lo mejor del mes de julio en lo que hace a lanzamientos de esta índole, mientras que a su vez se asoma como un proyecto ambivalente que no pareciera que vaya a impregnarse en la memoria colectiva de una fanaticada ya saturada de propuestas metaleras.

La pista de apertura, ‘Prophets of Demise’, comienza con una introducción de arpegios en las seis cuerdas que se sienten tan solitarias como intensas, un tanto cíclico es el comienzo aunque emocionante, que sirven para desatar un riff potente y veloz. El aluvión de guitarras se siente como un ametrallamiento lleno de solos intercalados que la hacen una pista explosiva. Glen no escatima en exhibir sus dotes como guitarrista, acompañando la pista con variadas ejecuciones de solos y fills. Junto con una sección rítmica revitalizada, que incluye al mayor de los Drover en el juego de parches, plasmando su reconocido doble bombo el cual le da un efecto “pared”, una pieza marcada y lista para entrar en la batalla que se desata para dar lugar a la voz poderosa e incisiva que, urgentemente y vitalmente, por primera vez dice presente en un tiempo dispar, dando en ciertos puntos ganchos agresivos que marcan la tendencia del comienzo del álbum y que nos toma bien predispuestos para continuar en este nuevo viaje musical.

Con esa idea puesta en curso llega su segundo tema: ‘The Vision’. Sorprendente incursión que demuestra la habilidad para adaptar y reinterpretar un tema de corte y ritmo fiel que se aferra al Metal más puro y que representa perfectamente este álbum. Presenta momentos de introspección y emotividad al entorno del álbum. Combina melodías melancólicas con solos de guitarra virtuosos que remarcan una voz muy adecuada para la propuesta musical de la banda. Finalmente, se unifican muy bien esos momentos de contundencia necesaria para resaltar la potencia de la interpretación, desvaneciéndose la misma en un tétrico juego de arpegios que culminan la canción.

‘Pick Up The Pieces’ comienza con una introducción atmosférica y ambiental para luego dar paso a riffs de guitarra potentes con ritmos sórdidos y densos. Entre las composiciones más destacadas del álbum se encuentra esta canción, ya que la misma combina pasajes muy metaleros con la agresividad del Thrash y el ataque con doble bombo característico del Power Metal. Una mixtura entre la intensidad y la melodía que parecían no encajar y que al final están destinadas a unirse y formar un conjunto perfecto. Una búsqueda constante de perfección en su sonido y llevarlo a otro nivel, y bien este es el resultado, sólido desde el primer tema hasta el final que nos invita a querer más. Nuevamente hallamos los alaridos intensos de su vocalista en los puentes (invocando al mismo Metal God, Rob Halford), mientras que Shawn aporta una serie de salvas en el trabajo detrás del kit de batería.

Golpes de batería bien fuertes y una mezcla de guitarras limpias dan inicio a la cuarta pista del disco: ‘Ancient Desire’. Una seria intensificación de las armonías y la innegable influencia de Metal pesado y oscuro en la voz de Henning hacen de esta pista un corte crudo, oscuro, y una sumatoria de lo que cada uno aporta como músico. Es precisamente la perfecta invitación a estar escuchando este álbum las veces que sean necesarias. Llegamos a una parada, instrumental, con un fondo tipo teatral, junto a coros traídos de los círculos del infierno más profundo, descritos por las manos de los hermanos Drover. Una muestra sin duda de la perfecta disciplina y constancia de la banda, aunque puede hallarse algo monótona en su reproducción. Las tendencias Groove se perciben evidentemente en el fraseo de Glen, y en la densa distorsión que utilizó en la grabación de la pista… y de todo el disco.

Los tintes de Death Metal melódico están muy presentes en ‘Dark Reflections’. Con una parte de la canción diciéndonos que la vida nunca volverá a ser igual parece que estamos ante una definición explícita de la más descarnada realidad. La voz ruda y profunda acompaña esa travesía tan tenebrosa de la canción con una clara yuxtaposición entre ella y el riff de la guitarra, que se desarrolla de manera hipnótica sobre el diapasón. Podemos decir que los tonos graves de las guitarras y la voz hacen de este mensaje un poema hecho canción. Potentes riffs y juegos de guitarra solista, golpes de batería incisivos y una letra que nos repite que la temática está relacionada con los miedos más profundos del ser humano guían el transcurro de la canción. Los intentos de voces guturales de Henning no son su fuerte, pero dan a ‘Dark Reflections’ una suerte de manto tenebroso e industrial, ya que a su vez nos recuerdan a los alaridos del propio Ripper Owens.

Una clara reminiscencia a los sonidos memorables del clásico Megadeth se puede apreciar en el single ‘Dethroned’. Dando inicio con un riff sumamente thrashero, que también recuerda a las majestuosas composiciones del mítico Gary Holt, ‘Dethroned’ pareciera ser una de las pistas más directas de este recorrido musical. Con puentes que se asemejan mayormente a un Heavy Metal más clásico, y la sección rítmica aportada por Shawn Drover que nos retrotrae a su pasaje por el gigante monstruo liderado por el colorado Mustaine, el corte de difusión quedará impregnado en el oído de los seguidores de este nuevo proyecto como uno de los claros puntos fuertes de su primer lanzamiento de larga duración. El estribillo, por su parte, manifiesta un perfil mucho más comercial en lo que hace a esta placa, introduciendo pasajes más melódicos en el cántico de su vocalista, mientras que el solo de Glen hace lo propio, de manera acotada y directa.

Empezamos a bordear el fin de la nueva placa con ‘Never Again’. Un riff sucio acompañado por los ya conocidos fills de guitarra de Glen nos presentan el inicio de la séptima pista. Con estrofas que son direccionadas de igual manera por la guitarra y el bajo, la pista se construye a sí misma, recalando en una serie de solos que batallan entre sí para desvanecerse y, paralelamente, engancharse con el riff inicial, el cual identifica al marco general de la canción. Un tanto invariable, pero no escatima versatilidad a un álbum que cuenta con tan solo ocho pistas en su haber.

Desde las primeras notas de ‘Eternal Screams’ encontramos un tema compuesto por bellos arpegios, la voz una vez más acompañando esa aura bastante fosca, un sonido bastante influenciado por Black Sabbath (a estas alturas, ¿quién no ha sido influenciado por ellos?). La distorsión de la guitarra te seduce mucho y más cuando se suma a esa exhibición de batería, machacona y marcada por una velocidad que no decrece, es el claro ejemplo de por qué es el tema que cierra el disco. El bajo de DiBiase juega un papel importante, y es que nadie puede discutir el toque que le agrega Joe a todo el álbum con su conducción, entendiendo a que nos lleva cada una de las canciones del álbum. Sus toques siempre adheridos a la voz hacen que este corte nos invite a disfrutar de una pista con cambios de medio tiempo bastante claros y perfectos. En sus casi ocho minutos de duración, la pista que da clausura al álbum es tan envolvente como hipnótica. Un cierre a la altura.

Miembros de la banda:

  • Glen Drover – Guitarra. 
  • Shawn Drover – Batería.
  • Joe DiBiase – Bajo.
  • Henning Basse – Voz.

WITHERING SCORN - Prophets of Demise

El cuarteto está profundamente arraigado en el Metal, pero Prophets of Demise supera las expectativas en su notable ejecución. Es evidente que la banda vertió sus corazones y almas en la creación de este disco. Este álbum encarna la esencia de cuatro músicos apasionados que hacen lo que los hermanos querían hacer hace muchos años: discos por la simple y llana razón de ser. La diferencia es que Withering Scorn posee la habilidad y el talento para lograrlo. Destacado álbum debut, para una destacada flamante nueva agrupación.
7.8

Producción

7.7/10

Composición

8.2/10

Replay Value

7.5/10

Valoración Personal

7.8/10

Pros

  • Triunfal regreso de los hermanos Drover a la escena.
  • Riffs y solos de guitarra ejecutados magistralmente, dotando virtuosismo con mucha interpretación.

Cons

  • Repetitivo uso de los mismos patrones en las introducciones limpias.
  • Puede hallarse ligeramente monótona la sección rítmica del álbum.
  • La mezcla final genera cierta mella en la producción sonora de las vocales.

Summary

 

 

 

Santino G. Barbas

Aficionado a la música, sobre todo a géneros dentro de la ramificación del Rock n' Roll, ya sea Heavy Metal o Hard Rock. Coleccionista de álbumes y misceláneas relacionadas a lo mismo. Seguidor y simpatizante de la cultura pop en lo que respecta a películas clásicas, series y animaciones.