THE CHRONOMASTER PROJECT – The Android Messiah 🇮🇹 (Album Review)

Por Alessandro Power

Cuando nos referimos directamente al metal ópera es muy difícil no pensar en Arjen Anthony Lucassen y Tobias Sammet, dos grandes compositores que gracias a su ingenio compositivo han alcanzado un éxito monumental utilizando este estilo musical, cada uno con su respectiva banda, el holandés con Ayreon y el alemán con Avantasia. Otros conjuntos que también se han movido de maravilla en este estilo, pero sin llegar a ser tan mediáticos como los antes mencionados son Marius Danielsen Legend Of Valley Doom, Aldaria y Signum Draconis, tres proyectos de metal ópera que si aún los has escuchado te invito a que lo hagas de inmediato.

Para seguir en contexto con el tema hoy vengo a presentarles el nuevo proyecto italiano The Chronomaster Project, que por sus condiciones y características musicales se hace por demás interesante, pues trata de ser un trabajo de metal estilístico, diferente e innovador, para llevarnos en un viaje interestelar para descubrir el universo del Chronomaster y sus aventuras. Los aspectos innovadores se encuentran en la conexión con la ópera metal Docker’s Guild, escrita por Douglas Docker y que por primera vez en el mundo del metal recrea la hipótesis del universo de Tommy Westphall (The Westphall Theory Of A Unifield Tv Universe). Pero el proyecto no queda solo en eso, porque viéndolo a profundidad también es un rico estado lírico que se desarrolla gradualmente y se ambienta en un multiverso conectado al disco. Para dar vida a los personajes de la increíble historia que aquí se cuenta, se ha contado con la participación de múltiples artistas para que cada uno interprete un papel, ellos son: Marcela Bovio como Mother Universe, Mina Osegueda como The Witch, Chris Boltendhal como The Fanatical Invader, Mike Mills como The Colony Leader, Gianluca Mastrangelo como The Pope, Snowy Shaw como The Ice Blizzard, Amanda Somerville como The Captain, Vicky Psarakis como Princess Aliria, y Mark Boals como The Father.

El viaje musical arranca con «The Mission» un tema por demás elegante y de grandes proporciones melódicas, dónde la participación vocal de Mark Boals, es esencial. La canción nos presenta a TAU1 y su población, que se compone de seres digitales conscientes basados ​​en cadenas de información. La población es pacífica y se dedica a recopilar información. Cada ser en este planeta tiene noticias y nociones tanto en su propio planeta como en otros planetas. Aparecen como seres humanoides con el rostro marcado por líneas de colores, que indican la jerarquía y el campo en el que trabajan. Hace tiempo que saben que los invasores se están expandiendo, pero su red de conocidos no les ayuda a comprender de dónde podría provenir la amenaza. Anticipándose a un ataque a gran escala, el consejo de 110b decide comenzar los preparativos para crear al cronometrador, un androide sensible capaz de adaptarse a todos los planetas y cruzar el espacio y el tiempo con facilidad. Su tarea es encontrar el país de origen de los invasores y encontrar una manera de evitar su expansión en el cosmos. En la composición tenemos el enfrentamiento entre el cronomante y el padre (científico delegado por el Consejo para crearlo): el diálogo entre ambos recuerda al de un padre y su hijo en la transición de la adolescencia a la edad adulta. El cronometrador, que acaba de salir a la luz, solo tiene tiempo de aprender la misión de su padre: de hecho, entiende que poco después el planeta que lo generó implosionará, trayendo consigo la figura de su creador.

Con un guitarreo más movido llega la segunda pieza «The End Of My World?» la cual posee un estribillo muy emotivo, teclados vitales y unos riffs más intensos para empalmar un sonido más hard rockero. En la letra de esta canción el cronometrador ha tomado plena posesión de sus facultades y ha incorporado todos los datos que necesita para su misión. Pero su gestación y nacimiento dejaron a TAU-1 con el nivel de energía por debajo del umbral de supervivencia. Todo lo que tiene que hacer el cronometrador es subirse a su nave espacial y partir hacia una de las primeras rutas conocidas. Tan pronto como sale de la atmósfera del planeta, ve que TAU-1 se extingue, quedando así a merced de la flota enemiga. El sistema de camuflaje permite al cronometrador escapar y comenzar su búsqueda. En la pista sentimos su determinación por llevar a cabo la misión de salvar su planeta, y también el peso que carga como única esperanza tanto para Tau-1 como para todos los planetas golpeados por el azote de la invasión.

Con sonidos más modernos llega «The Ancient Throne Of Tessev V» una pieza dónde se nota a placer la maestría musical de este proyecto, con algunos guiños al metal gótico, con un sonido innovador excelente en todo momento, incluidas las dulces voces de Vicky Psarakis. En esta composición el Chronomaster se dirige hacia uno de los últimos planetas por donde han pasado los invasores. Es Tessev V y está ubicado en una estrella, así llamada por la gente de TAU-1, nebulosa asimétrica roja. Ahora es un planeta pacífico, pero su pasado está lleno de guerras eternas y derramamiento de sangre: hace miles de años, la gente de Tessev V, era conocida en la nebulosa como el mayor fabricante de armas, así como por el uso despiadado de esas armas entre sí. Cuando el cronomaestro llega al planeta, descubre que está completamente devastado, desierto y que la superficie del planeta está destrozada en muchos lugares. Muchos son los volcanes en erupción sin cesar. El Chronomaster ve los últimos momentos del planeta a través de su visor cronodinámico. La princesa Aliria decidió utilizar un arma ancestral y mitológica de sus ancestros contra el asedio de la flota de guerra enemiga: el Trono purificador. Esta arma fue fabricada hace milenios, y su sola existencia impidió que todas las guerras continuaran, desafortunadamente, Aliria no sabía que el Trono fue creado para destruir a Tessev V de una manera que ninguna forma de vida pudiera volver a vivir en el planeta. Finalmente, la princesa se convirtió en la única responsable de la extinción de la vida en su planeta. Ella realmente creía que usó el arma incorrectamente, pero en realidad funcionó como debería. Los invasores no pudieron hacer nada más que presenciar la destrucción del planeta y establecer la ruta a otro mundo habitado mientras se aseguran de que Tessev V ya no se puede terraformar.

En «The Invaders’ Chronicle Part 1: We came in peace» tenemos uno de los temas más elegantes del álbum, con la gran participación de la vocalista Amanda Somerville. Hermosa pieza que nos habla del pasado de los invasores ya que esto es clásico de muchos planetas: diversas guerras han sacudido el planeta a lo largo de los siglos, pero ahora parece que se ha alcanzado una buena estabilidad que permite a la industria espacial visitar planetas cercanos en busca de formas de vida. El punto de inflexión llega cuando los habitantes del planeta consiguen crear las primeras naves de exploración y llegar a los primeros mundos habitados tras décadas de travesía. En los planetas alcanzados, los «invasores» establecen relaciones positivas con las poblaciones, tanto que se integran. En la canción se respira el deseo de conocimiento de la tripulación del barco lista para partir: la capitana revela su deseo de explorar para conocer nuevas razas y crear relaciones de amistad y cooperación con ellas. Este es ciertamente el punto moral más alto en la historia de los invasores.

Sin darnos cuenta hemos llegado a la mitad del álbum y «The Last Man Of Ice» es una canción con un ambiente más oscuro que está llena de riffs pesados, tambores bien ajustados ​​y una vocalización más áspera. Acá el Chronomaster llega a BlackSun, un planeta con temperaturas increíblemente frías, donde viven los hombres de hielo. Aquí habla con el último de los sobrevivientes, llamado Ice Blizzard, quien le dice que los enemigos los vencieron fácilmente con sus armas que lanzaban llamas, pero que luego se fueron dadas las condiciones climáticas demasiado duras para poder crear una colonia estable. Aquí el Chronomaster entiende la locura extrema de los invasores que atacan solo por el deseo de conquistar, sin pensar en si un planeta les puede ser útil o no. Ice Blizzard le muestra al Chronomaster algunos restos de las naves espaciales de los invasores, y en uno de estos, nuestro protagonista logra encontrar una computadora en funcionamiento desde la cual extraer mapas espaciales incompletos, que desafortunadamente no contienen las coordenadas iniciales. Sin embargo, el Chronomaster confía en poder, de una forma u otra, encontrar el hogar de los invasores.

En «The Invaders’ Chronicle Part 2: In Hoc Signo Vinces» tenemos un tema que inicia con sonidos de órgano de iglesia y unos solos de guitarra impecables, para luego tomar un trasfondo sinfónico y un sonido potente que emerge de unos riffs cañeros que queman. Esta tremenda composición nos dice que después de la primera serie de exploraciones científicas y pacíficas, se produce una poderosa deriva religiosa en el planeta de los invasores, que lleva a tener a la religión católica romana como eje de la vida religiosa y social. Todas las demás religiones están prohibidas, los estados más influyentes (Estados Unidos, China y la CEE), sobre la base del nuevo dogma, se han unido en la lucha contra el terrorismo islámico, todos bajo el poderoso pero oculto liderazgo del Papa, ahora cierto. líder supremo del planeta El Papa recién elegido, Urbano X, lanza la primera cruzada espacial (fuertemente apoyada por Estados Unidos, Europa y China, siempre en busca del crecimiento económico que puede derivar de las grandes órdenes aeroespaciales y militares). Donde llegan las nuevas naves invasoras es muerte y destrucción, incluso contra los integrantes de las primeras exploraciones que se han integrado

La séptima canción «Generation Clash» nos cautivará con sus distintas facetas musicales, iniciando de manera suave para después volcarse hacia un estribillo desgarrador expresado por la entonación vocal de Chris Boltendhal. Tema bastante versátil que habla de IDIM-5, un planeta ilustrado dedicado a la ciencia, al que llegaron y se asentaron los colonizadores de la primera misión, considerándolo un mundo ideal e integrándose perfectamente con los nativos. Es un planeta fundado en la ciencia y la compasión, el respeto y la diversidad como enriquecimiento moral y cultural. Llegan los cruzados de la segunda expedición y condenan a muerte a los gobernantes ilustrados por haber creado un mundo inmundo y pecaminoso, no basado en la religión sino solo en la ciencia y en la mezcla de pura raza humana y escoria alienígena. Aquí asistimos al enfrentamiento verbal entre las dos almas de los colonizadores, y vemos la victoria de la franja más agresiva y racista, que encuentra el mundo tan impuro que decreta su aniquilamiento mediante el bombardeo nuclear.

En «Revenge Of The Last» tenemos un tema potente de metal melódico que juega con sintetizadores modernos y al mismo tiempo aprovecha al máximo el atractivo registro vocal de Nina Osegueda. Esta vibrante canción nos habla de un planeta donde las brujas y hechiceros gobiernan un mundo que mezcla magia y tecnología. El cronómetro llega al planeta y encuentra la tumba de la última bruja, erigida por los invasores como advertencia contra quienes van en su contra. ChronoVision del juicio de la última bruja restante que es condenada y quemada en la hoguera. Pero antes de la hoguera, la bruja les dice a los humanos que ha tenido una visión de su futuro: los invasores irán y atacarán a la raza equivocada, que creará un arma que los destruirá a ellos y a su pasado. Ella sabe que Chronomaster la está observando desde el futuro, por lo que se refiere a él dándole coordenadas para encontrar el planeta Tierra gracias a los mapas estelares que Chronomaster ya ha recuperado de una nave espacial invasora en el Sol Negro.

Uno de los temas más melódicos es «The End Of Your World» la que dibuja grandes armonías gracias a los sintetizadores y los teclados, y los coros suenan muy amenos y bastante orientados al hard rock. La letra de esta canción narra como el Chronomaster finalmente llega al mundo natal de los invasores en su año 1983. Se mezcla con la sociedad y se da cuenta de que ha llegado en el momento adecuado. La tensión autodestructiva de la raza humana se está disparando. Finalmente ha llegado el momento de salvar todos los planetas que ha encontrado a lo largo del viaje, además de su planeta de origen. Se las arregla para tomar la forma de un alto general estadounidense que coordina un ejercicio muy importante de la OTAN. Se disparan cohetes nucleares hacia la Unión Soberana.

El tema que finaliza con la obra es «Nothing Left To Lose» un dulce y sensible tema marcado por unos solemnes teclados y un juego vocal estremecedor, dónde resalta el registro de la cantante Marcela Bovio. Y en la parte media tenemos un solo de guitarra impactante que de cierta manera me recuerda a los del proyecto del ex guitarrista de Stratovairus, Timo Tokki’s Avalon.

Aunque hoy en día ya son muy comunes y ya no sorprenden a nadie este tipo de proyectos de metal ópera, tengo que reconocer que está vez The Chronomaster Project, ha creado un trabajo memorable, tanto en el ámbito musical como lirico, con canciones que abarcan múltiples estilos y que es evidente que están cuidadas hasta el más mínimo detalle. No me queda más que ponerme de pie y decir que esta es una impecable obra conceptual dónde cada artista invitado cumple su papel a la perfección.


Sello: Elevate Records
Lanzamiento: 15 de Abril, 2022
Género: Progressive Metal Opera

«The Android Messiah» Track List:

01 . The Mission (Feat. Mark Boals)
02. The End Of My World?
03. The Ancient Throne Of Tessev V. (Feat. Vicky Psarakis)
04. The Invaders’ Chronicle Part 1: We came in peace (Feat. Amanda Somerville)
05. The Last Man Office (Feat. Snowy Shaw)
06. The Invaders’ Chronicle Part 2: In Hoc Signo Vinces (Feat. Gianluca Mastrangelo)
07. Generation Clash (Feat. Mike Mills & Chris Boltendhal)
08. Revenge Of The Last (Feat. Nina Osegueda)
09. The End Of Your World
10. Nothing Left To Lose (Feat. Marcela Bovio)

THE CHRONOMASTER PROJECT - The Android Messiah

The Chronomaster Project, ha creado un trabajo memorable, tanto en el ámbito musical como lirico, con canciones que abarcan múltiples estilos y que es evidente que están cuidadas hasta el más mínimo detalle. No me queda más que ponerme de pie y decir que esta es una impecable obra conceptual dónde cada artista invitado cumple su papel a la perfección.
8.9

Producción

9.0/10

Composición

8.7/10

Replay Value

8.7/10

Valoración Personal

9.0/10

Pros

  • Temática futurista bien expresada.
  • Alto nivel compositivo.
  • Sonido nítido.

Cons

  • Estribillos muy comerciales.

Alessandro Power

Soy un amante del metal, con orientación hacia uno de sus subgéneros el cual yo considero de un de los mejores el Power Metal, aunque también me gusta el Thrash, Folk y Melodic Death.