QUADVIUM – Tetradōm

- 🎸 Metal Progresivo/ Técnico/ Jazz fusión
- 🌎 Multinacional
- 📆 30 de Mayo, 2025
- 💿 Agonia Records
- Tracklist:
- Moksha
- Náströnd
- Apophis
- Ghardus
- Adhyasa
- Sarab
- Eidolon
Por Eliana Giselle Rodriguez
ALINEACIÓN:
- Bajo: Steve Di Giorgio
- Bajo: Jeroen Paul Thesseling
- Batería: Yuma van Eekelen
- Guitarra: Eve Smith
QUADVIUM presenta su álbum debut. Este proyecto de dos conocidos bajistas fretless (integrantes de bandas como Pestilence y Death), se convertirá en amor a primera escucha. La música como arte complejo.
El 30 de mayo se lanzó finalmente Tetradõm, el álbum debut de Quadvium. Este ensamble, que se gestó lentamente desde finales de 2019, nace desde el anhelo de dos genios del bajo fretless: Steve Di Giorgio (Testament, Death) y Jeroen Paul Thesseling (Obscura, Pestilence). Unidos por la necesidad de explorar un espacio musical en donde dos bajistas no compitan, sino que coexistan en perfecta simbiosis.
Aquí, la gravedad parece invertirse; Los bajos flotan en el aire. Se deslizan como olas en un gélido río… Para referirse a la banda, los músicos expresan: «No se trata de un bajo líder y uno rítmico, ni de solos virtuosos por turnos. Queríamos un proyecto que respondiera a nuestras necesidades más básicas como músicos, y eso tomó tiempo, diálogo y muchos ensayos imaginarios antes de plasmarlo».
Tras una cuidadosa búsqueda, completaron la alineación junto a un confiable compañero de banda, el baterista Yuma van Eekelen (Our Oceans, Pestilence) y la guitarrista y productora
Eve Smith (Myth Of I, Kaathe), quien además se encargó de la grabación y producción del disco, junto a la coproducción de Yuma. La masterización corrió por cuenta de Dereck Blackburn en Quiethouse Recording, y el arte del mismo (enigmático) lleva la firma del gran Travis Smith (Amorphis, Cynic, King Diamond).

¿Es este el sonido de un nuevo lenguaje? Ó ¿un nuevo lenguaje que surge de una propuesta musical no común?
Lo que la hace especial a esta banda es la disolución de roles tradicionales. El bajo no sólo no acompaña ni adorna, sino que ambos, logran una conversación única, destacándose con igualdad de protagonismo. Para los que no sabían, hasta ahora, como yo, qué significa fretless? Son bajos con múltiples cuerdas, los cuales no poseen trastes, provocando un sonido más fluído y expresivo.
Difícil tarea de intentar analizarlos no sabiendo música, pero como fiel oyente, me abocaré más que nada a las sensaciones que se desprenden. Si sos músico, vas a poder disfrutarlos desde otra dimensión. La música tiene esta magia, de penetrar e interpelar con su lenguaje universal, y que logres entenderla y apreciarla, aún no sabiendo leerla. Siempre pongo a modo de ejemplo, que si esto no fuese así, una de mis bandas favoritas, no sería Animals As Leaders (que de hecho, comparten mucho en común…).
Pequeño apartado a modo más técnico, para entender su propuesta musical y la complejidad que la caracteriza;
– Uso intensivo de compases irregulares: 5/8, 7/8, 9/16.
– Polirritmia entre bajo-batería, generando tensión sin perder groove.
– La batería trabaja tanto como metrónomo como colorista, a veces marcando el tiempo y otras fragmentándolo.
Las canciones que más me han llegado de este trabajo son;
«Moksha», quien abre el disco con una introducción suave en guitarras, que rápidamente se ve arrastrada por una oleada de energía con una precisión casi quirúrgica.
«Náströnd», en donde los teclados aportan color. Si bien su participación es corta y a modo de acompañamiento, corta un poco la crudeza de las métricas complejas.
«Apophis». Totalmente caótica. Tantos ritmos, en tantas direcciones, son una locura! ¿Jazz? ¿Metal? ¿Fusión? Probablemente, sí, todo eso y más.
«Sarab» es quizá la canción con más «alma» del álbum. Un poquito menos mecanicista, más melódica. Sus arreglos jazzísticos aportan un respiro y la convierte en el track más emocional. (Está sensación, creeme que se vuelve muy necesaria entre tantos cálculos matemáticos…).
Me intriga saber el significado del nombre Quadvium, la única aproximación que logré encontrar es que podría estar inspirado en el «quadrivium», que en la Edad Media representaba las cuatro artes superiores: Aritmética, geometría, música y astronomía. Estas se enseñaban después del «trivium» (gramática, lógica y retórica).
Este disco y proyecto es ambición pura, estilísticamente sofisticado, y con una calidad indiscutible. Es el reflejo profundo de su universo conceptual, de una propuesta artística única cerebral/experimental. Lo que prevalece es la conexión/comunión entre cada uno de ellos.
Acá no hay espacio para ningún margen de error. Realmente sorprenden, pero existe algo que me falta… algún tema que salga del plano cerebral y golpee directo en el pecho. Un clímax que nos haga levantarnos del asiento a aplaudir de emoción. Esa pausa emotiva que se necesita entre tanto cálculo perfecto. ¿Descubrí a uno de mis proyectos favoritos del año? Quizá sí, sin embargo, me falta esa pausita… Un poco más de corazón y un poquito menos de mente…
.
QUADVIUM - Tetradōm
Disco y proyecto profundamente ambicioso, estilísticamente sofisticado, y con una calidad indiscutible. La música como arte complejo.Summary