WHEEL – Resident Human (Album Review)
Por Alejandro Melgar
En el saturado mundo actual de la música (y la culutra pop en general), está claro que construir un producto innovador y poco común es algo muy raro y extraordinario. Muchas bandas apelan a desarrollar una idea creada o popularizada por otros artistas y partir de una base para construir su propia propuesta. Esto no es necesariamente malo cuando se tienen los ingredientes, la capacidad y la ejecución para llevar a cabo un nuevo proyecto que toma muchas influencias de otros pero que a la vez se distingue como un producto propio, con identidad y muy buenas ideas.
Para dejarnos de rodeos, es clarísimo que la influencia máxima de Wheel, el nuevo acto finlandés sensación del Progressive Metal, no es otra que los laureados Tool. Las comparaciones son inevitables, desde su claro sonido de desarrollos extensos e hipnotizantes, la estructura de sus canciones, el sentimiento general de la propuesta, y bueno, ¡hasta el nombre suena similar! (y hasta podríamos decir que la Herramienta se usa para fabricar la Rueda). Digo esto porque no es un dato menor, cuando uno se topa con una banda nueva y quiere darle una oportunidad, las comparaciones con actos más establecidos son algo casi obligado que uno hace inconscientemente. El debut de Wheel, “Moving Backwards” fue editado en 2019 y les valió de cierta notoriedad, llegando mucha gente a bromear incluso que ese año se editaron “tres discos de Tool” (“Moving Backwars” de Wheel, “Lotus” de Soen y bueno, el esperadísimo “Fear Inoculum” de los propios Tool).
Pasan dos años y, pandemia mediante, Wheel está listo para lanzar su importante segundo álbum, ese que terminaría por consagrarlos dentro de un panorama musical competitivo y cruel, donde si no generas el impacto suficiente, serás probablemente olvidado al poco tiempo. “Resident Human” viene para afirmar que ese impacto es contundente y vital, valiéndose de los sonidos antes mencionados para generar algo especial, duradero y que aunque siempre sea comparado con sus hermanos mayores, está dotado de suficiente identidad para funcionar como obra independiente.
La obra se estructura en dos secciones bien marcadas (aunque intercaladas): tres temas épicos de desarrollos inmensos y hasta psicodélicos, y cuatro incursiones más cortas y de carácter single. En la primer categoría nos encontramos el avasallante arranque de “Dissipating”, un himno absoluto de grandeza que va construyendo su estructura lentamente hasta llegar a una explosión instrumental riquísima en matices, con la batería de Santeri Saksala haciendo destrozos (en el buen sentido) y la guitarra de Jussi Turunen dibujando melodías increíbles, todo marcado de manera sutil y a la vez contundente por el bajo de Aki ‘Conan’ Virta. Es el perfecto arranque para un álbum que ya promete desde el vamos.
“Hyperion” fue liberado recientemente como single, algo bastante inusual si consideramos sus doce minutos de extensión. Pero cuando comienza a desarrollarse entendemos el porqué de esta elección: se trata de una canción accesible y a la vez compleja, que basa mucho su sonido en la dupla Tool/Soen adoptando lo mejor de ambos (¿o del mismo?) mundos, con muchas idas y vueltas y un sonido impecable que nos mantiene enganchados durante toda su extensión. Lo mismo ocurre con el tema título “Resident Human”, con casi once minutos te extensión. Una intro solemne y misteriosa da paso a un desarrollo más ambiental y que hasta parece improvisado, pero todo está calculadísimo cuando la rueda se pone a girar. Nada está librado al azar, y nos encontramos con otra pieza fundamental que hará las delicias de los fans clamando por esa complejidad progresiva.
En la segunda sección, la de las canciones más cortas, tenemos varios ejercicios interesantes. “Movement” muestra el lado más pesado e intrincado de la banda, una canción para cabecear y exorcizar nuestros demonios; “Ascend” continúa ese sendero de pesadez con un medio tiempo que se torna etéreo y nos hace perder en el éxtasis de su hipnosis; “Fugue” es una pieza de carácter más misterioso, con un lento desarrollo y pequeños retoques sinfónicos que acompañados del bajo tornan a esta canción en algo delicioso y magistral, uno de los mejores momentos del álbum. Todo termina de cerrar con “Old Earth”, el final del álbum es un ejercicio instrumental sumamente intimista de piano, que nos despide de manera muy melancólica, diferente a todo lo que habíamos escuchado antes.
Así se termina un álbum sumamente interesante, que si bien no se despega de esa etiqueta de ser comparado constantemente con sus hermanos mayores de Tool, va a valer para que Wheel también se haga un nombre propio y salga victoriosa en una escena que no perdona y que siempre busca la siguiente banda innovadora y explosiva. Los músicos tienen el talento y la capacidad suficiente para seguir creciendo y dotar de más identidad a su propuesta, pero hasta entonces podemos disfrutar de un producto construído con sumo cuidado, detalle y amor por la música. “Resident Human” es un testamento al buen gusto musical, a la melancolía de los desarrollos hipnóticos y que si lo evaluamos como un producto independiente y evitamos las comparaciones, se vuelve una experiencia ampliamente disfrutable.
Sello: OMN Label Services
Lanzamiento: 26 de Marzo, 2021
Género: Progressive Metal
“Resident Human” track-listing:
1.Dissipating (11:52)
2.Movement (4:24)
3.Ascend (4:23)
4.Hyperion (12:09)
5.Fugue (4:32)
6.Resident Human (10:32)
7.Old Earth (2:17)