THERION – Symphony Masses: Ho Drakon Ho Megas 🇸🇪 (2022 Reissue) (Album Review)

Por Michael Prado

El pasado deja huellas que pueden llegar a ser imborrables, y en el caso que concierne a la labor de los artistas musicales llega a ser más contundente dicha afirmación, dado el hecho de que la andanza de estos personajes creadores de arte queda enmarcada para la posteridad gracias al legado que dejaron en sus grabaciones a lo largo de su trayectoria.

Siempre resulta bastante interesante revisitar el pasado de agrupaciones que ya llevan su buena cuota de años en esta industria, ya que, aparte de que nos podemos encontrar álbumes cuya calidad sigue siendo tan genial como cuando aparecieron por vez primera, podemos ir conociendo y comprendiendo mejor la evolución de su arte, lo que los ha llevado a ser lo que hoy día manifiestan en sus creaciones musicales.  Y hoy quería que revisitásemos juntos un disco muy especial en ese sentido.

Creo que a hoy día todo el que se diga “conocedor del género Metal” sabrá quiénes son Therion (claro, menos son los que sabrán que hay 5 bandas llamadas así, jejeje, pero hoy nos enfocaremos en la que se originó en Suecia allá por el 1987 bajo el nombre original de Blitzkrieg, inició haciendo Death Metal y hoy día practica uno de los más celebrados y grandilocuentes estilos de Metal Sinfónico que podemos conseguir).  Pues bien, ellos también tuvieron su evolución para llegar a ser la maquinaria épica que todos conocemos, y parte de ello lo podemos encontrar en su fascinante tercer álbum de nombre “SYMPHONY MASSES: HO DRAKON HO MEGAS”, que fue lanzado allá en el año 1993, al cual el sello Hammerheart Records decidió brindarle nuevos bríos en una versión remasterizada que llegará a las tiendas el 29 de abril del presente año.

Para esa ocasión el grupo era conformado por su líder, el multiinstrumentista, cantante y compositor Christofer Johnsson (quien además cuenta en su currículum con formar parte de una orden de ocultistas llamada Dragon Rouge, algo que, dicho sea de paso, alimenta mucho su arte), el guitarrista Magnus Barthelson (quien dejaría el grupo en el 1994 y actualmente es integrante de Order Of Isaz), el bajista Andreas Wallan Wahl (que se bajó del barco draconiano en 1993) y el batero polaco Piotr “Docent” Wawrzeniuk (quien acompañaría a Johnsson en la travesía artística hasta el año 1996, teniendo apariciones en vivo como cantante en 1997 y 2007).

Therion mayoritariamente es conocida por su era que nos ha brindado la nada despreciable suma de 13 álbumes que son pura magia épica, sinfónica y operática (14 si unimos a esa suma lo que poco a poco se empezaba a dilucidar con más claridad que sería la senda de estos suecos en el álbum “Leppaca Kliffoth” (1995)), pero muchos son los que pasan de largo sus orígenes, cuando la música de ellos era más extrema y menos grandilocuente, donde no predominaban los cantos de ópera sino voces desgarradoras y blast beats enloquecedores.  Dicha cuota de sonido brutal fue diluyéndose conforme pasaba el tiempo, y prueba de ello lo tenemos cuando llegamos al segundo álbum “Beyond Sanctorum” (1992), que ya presentaba elementos ajenos al Death Metal que la banda practicaba, como incluir voces femeninas y cantos masculinos limpios, además de ciertos sonidos autóctonos de Medio Oriente.

Sobre “Symphony Masses” debemos decir que en dicho álbum tenemos a un Therion que va amoldando más la idea de lo que quieren llegar a ser.  Johnsson no estaba conforme con tener a su mando una banda más de Death Metal.  Él quería lograr algo más afín a su pasión por lo oculto, y el sonido que la banda iba buscando ahora tenía matices más diversos.  Ya los blast beats no eran parte implícita del menú, y podíamos encontrarnos con influencias arábigas más evidentes, aparte de que varias de las canciones ya tienden más a una senda afín al Heavy Metal que han cimentado agrupaciones como Iron Maiden o Judas Priest, y otros como Doom Metal, Rock Gótico, algo de Jazz e inclusive música Progresiva.  El viejo Therion (con el cual el mismo Christofer ha manifestado sentirse insatisfecho, sobre todo con lo que fueron los 3 demos que grabaron a finales de los 80) había sido dejado atrás.  Las letras más agresivas y enfocadas a crítica social fueron cambiadas por tópicos alusivos a lo oculto, la mitología oscura creada alrededor de la fe Cristiana, esoterismo y demás asuntos relativos al estudio de la magia, que todavía en pleno siglo XXI sigue siendo generador de inquietudes en quienes se adentran en dicho estudio.

En cuanto al sonido del álbum, debemos decir que resulta muy grato ver que no fue necesario hacerles mayores retoques a los originales, que si me lo preguntan, para ser una grabación de no tantos recursos disponibles y que ocurrió a inicios de los 90, es de muy buena calidad, en especial para una banda que en ese entonces estaba en una senda artística que no había llegado a ser lo que nos ha legado en la mayoría de su catálogo musical.

Ojalá este relanzamiento logre llegar al mayor número de gente posible, invitándolos a conocer una cara que quizás no conocían de Therion muchos de sus fans más jóvenes (en especial quienes hayan empezado a escucharlos con el muy interesante álbum “Leviathan” (2021)).  Esa tríada inicial de álbumes de esta agrupación tan espectacular nos demuestra que todo grande tuvo orígenes realmente interesantes, y que muchas veces pueden no concurrir con su actualidad, pero que no dejan de tener relevancia con la misma.

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Sello: Hammerheart Records
Lanzamiento: 29 de Abril, 2022
Género: Death Metal