Review Clásico: AMADEÜS – Caminos Del Alma 🇪🇸 (2009)

Por Michael Prado

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ARTISTAS QUE PARECEN SER SALIDOS DE UN CUENTO DE HADAS

Existen seres humanos que parecen ser tocados desde su nacimiento por la magia de un hada madrina, tal cual le pasó a la Princesa Aurora al inicio de la película animada de Disney “La Bella Durmiente”, magia que les brinda un don que los hará destacar en gran forma en una diversa aptitud.  Gozo produce cuando uno llega a conocer a seres que por lo visto tuvieron la visita de esos seres místicos para depositar en ellos el don de hacer música de gran calidad, y no tener límites en ello.

Éste parece ser el caso particular del cantante y compositor Israel Ramos Solomando, quien lleva toda una vida ligada al arte, la cual lo llevó hace 18 años a fundar su banda principal, misma que lleva el atractivo nombre de AMADEÜS, en clara referencia a ese virtuoso, que quizás fue visitado por la misma hada madrina hace centurias (aunque en el caso del histórico compositor austriaco del siglo XVIII, tristemente no tuvo el suficiente tiempo en esta vida para hacer todavía más obras musicales como las que nos legó en sus 35 años de vida).

Desde el 2005, Amadeüs nos fue brindando hermosas maquetas que mostraban el gran talento compositivo de Isra, y nos hacían esperar con gran ansia que llegara el momento de degustar material discográfico de su parte como Dios manda.  El tiempo fue pasando, y al llegar el 2009, Isra, con el respaldo de una alineación compuesta por el guitarrista Rubén Lanuza (exmiembro de Alquimia de Alberto Rionda, Cara de Perro y Karnak), el baterista Gonzalo Moldes (quien también fue parte de Fairy Tales, Embellish, The Brained y ABC’s), el también guitarra David García (exintegrante de Morphium, Moonshide, Alchemist Vision, Black Hole y TMP), el teclista Sergi Camps (que forma parte actualmente de Moments) y el bajista Raúl de Sousa (que tuvo paso por Profanos y Arial), logra finalmente consolidar la grabación de las 11 piezas que conformarían el LP debut de Amadeüs, que aparecería en los aparadores de las tiendas de discos un 6 de febrero del 2009, a través de Santo Grial Records.  Dicho record llevaría el nombre de “CAMINOS DEL ALMA”.

CRUZANDO LOS CAMINOS DEL ALMA…

La producción discográfica debut de Amadeüs arranca con un pequeño intro de menos de 1 minuto, llamado, al igual que el disco, “Caminos del Alma”, tras lo cual, llega el momento de abrir en serio las puertas de este magnífico viaje musical con “Por El Río Olvidado”, una pieza cargada de emotividad y encanto por todos sus costados, en una interpretación instrumental simplemente hermosa, donde Isra puede mostrar en gran forma su labor vocal, donde todavía no alcanzaba los tonos más agudos a los que se arriesgó desde sus participaciones con Alquimia de Alberto Rionda.

La travesía se intensifica todavía más, y no es para menos, puesto que Isra será acuerpado por nada menos que el gran Ramón Lage (ex integrante de Avalanch, Paco Jones, Stunned Parrots, Geysser y Human, actualmente en Delalma), con quien compartirá labor vocal en la potente “La Cruzada del Miserable”, la cual, como su nombre nos indica, trata sobre una vida que ha arrastrado pesares en su existencia, algo que no solamente la letra, sino la música, que se desenvuelve con potencia y tonalidades melancólicas (algo que será habitual dentro de este disco).

Quizás rompiendo un tanto con ese corte melancólico, y trayendo algo de luz esperanzadora en la cadencia musical y la letra, nos adentramos en conocer a un “Héroe”, del cual nos habla la cuarta pieza musical del disco, mismo que busca volver del campo de guerra con rumbo al regazo del amor de su vida.  Vale la pena destacar el lindo trabajo que Rubén Lanuza consigue con sus solos de guitarra, y el de esta pieza es una de esas perfectas muestras.

Así, llegamos a mi momento favorito del álbum, donde atravesamos las canciones que más me llenan del mismo, y mi gran favorita del grupo, “El Pastor y la Luna”, es la que abre ese momento tan magistral, que para mí es el que le da la mayor grandeza y brillo propio al álbum.  La pieza cuenta con una letra romántica de calidad soberbia, una instrumentación que en definitiva le calza como anillo al dedo, y el buen Isra nos regala una de sus mejores performances vocales dentro de su carrera artística.

Si hay piezas que conmueven mi corazón, son aquellas que logran atraparme, cual si fueran soundtracks de un videojuego que tienen el poder de hacerme sentir dentro del mundo que se muestra en pantalla, y la hermosísima balada “Árbol Viejo” es una de esas oportunidades en que un artista consigue lo que grandes como Nobuo Uematsu, Yasunori Mitsuda, Motoi Sakuraba, Hiroki Kikuta, Junichi Masuda, Yuzo Koshiro, entre otros grandes creadores de música para lo que muchos denominamos el “octavo arte”, son capaces de lograr, atrapando las fibras sensoriales y haciéndote sentir la melancolía y dolor del protagonista de esta conmovedora canción, una de las más bellas que he oído en este estilo a lo largo de mi vida, donde Alberto Rionda colabora en la guitarra acústica, el teclista Roberto Junquera (ex músico de Avalanch, Asgaya y Guxán de Lluz) nos regala hermosas melodías de flauta y Xenia López engalana más el momento con bellas entonaciones de su voz.

Tras ese momento donde uno no podrá evitar derramar una que otra lágrima, nos adentramos en una pieza que, si bien se llama “La Última Canción”, por fortuna no lo es así dentro del disco, pero si lo fuese de esa forma, vaya forma de terminar, puesto que es otra de las mejores creaciones musicales de Isra.  Nuevamente su metal melódico, esta vez nutrido de hermosas orquestaciones que engalanan toda la pieza (y sobre todo el interludio instrumental), nos lleva de la mano en un momento más de disfrute con letra llena de romanticismo puro.

Pero vamos, que Isra también tiene su vena más heavy, y el momento más propicio para ello lo tenemos dentro de “VI”, en donde el grupo saca lo mejor de su artillería de ataque para una pieza con letra algo revanchista, pero que no pierde la elegancia con la que Isra labra sus canciones, algo que lo ha distinguido a lo largo de su carrera, no solamente en Amadeüs sino actualmente también en Gräce.

El momento más melancólico y quizás depresivo del disco llega en la hermosa “Anochecer”, para la cual la banda aborda todavía la intensidad del metal, pero la combina con una letra desesperanzada, y con las escalas musicales propicias para que sea un momento que hasta podría ser parte de un disco de Symphonic Gothic Metal en los años 90.

Otro momento muy intenso y lleno de momentos donde Gonzalo Moldes sacará a relucir la velocidad dentro de su batería, llega al meternos dentro de los pentagramas que conforman “Fausto”, la pieza que va dando el atardecer del disco en gran forma, con riffs poderosos, orquestaciones bien agregadas y un Isra Ramos que no se cansa de demostrar que es un vocalista más que competente, sin necesidad de pegar gritos cada 3 versos.

El disco concluye con “Sobre las Hojas”, un hermoso instrumental que tiene la misma base musical de la ya previamente escuchada “Árbol Viejo”, dando un encantador final a este álbum, del cual, a veces digo, con él siento lo que podría ser una caminata dentro de un bosque encantado.

ELEGANCIA POR CADA UNA DE SUS ARISTAS

Podemos decir con total certeza que Isra puso en cada uno de los detalles entero amor y empeño para que todo saliera de la mejor manera, juntándose con Alberto Rionda para las labores de producción, mezcla y masterización, que nos dan un resultado bastante efectivo para esa época.  Quizás el sonido final no haya envejecido de la mejor manera, pero para su época siento que se logró un resultado muy limpio y con la fuerza necesaria en su resonar.

Hasta la portada es algo que exuda elegancia minimalista y sobria, como lo es esa hermosa fotografía en fondo blanco, donde la modelo Sonja Mist posa acostada, vestida de negro, con una rosa azul en su mano, y rodeada de pétalos del mismo color.

TU ETERNA ESENCIA…

Si de iniciar carreras discográficas con gran porte se refiere, Isra lo consiguió al debutar a Amadeüs con este precioso disco, el cual pasan los años y sigue manteniéndose como uno de los más hermosos que he escuchado a lo largo de mi vida, y no puedo dejar de recomendar a quienes quieran conocer lo que se hace en la Madre Patria, puesto que éste es uno de sus mejores hijos, no solamente dentro del metal, sino en toda la música en general.