AYREON – Transitus (Album Review)

¿¡ Por qué !? ¿¿¿ Por qué ??? Los gritos de horror de los protagonistas de la historia de “Transitus” parecen generar un paralelismo con nosotros, los oyentes. ¿¡ Por qué, Arjen !? ¿¿¿ Por qué ??? Y es que la impresión general que nos da este nuevo capítulo en el universo de Ayreon es que pudo ser mucho, mucho mejor. Pero no nos adelantemos aún, hay mucho que analizar en el mundo ayreonauta y en los pensamientos del mastermind Arjen Anthony Lucassen antes de sacar conclusiones apresuradas.

Lo cierto es que luego del exitoso ‘The Source’ (2017), con una historia bien arraigada en el universo de ciencia ficción que todo fan de Ayreon anhela desentrañar, el genio de Lucassen estuvo contemplando qué dirección tomar con su siguiente incursión artística. En el medio tuvimos los excelentes y ambiciosos shows en vivo conmemorando los 20 años de ese discazo que fue ‘Into the Electric Castle’ (1998), que llevaron por nombre ‘Electric Castle Live and Other Tales’ y significó un milestone importante en la carrera del holandés, ganando aún más reconocimiento mundial y llevando sus producciones a elevadísimas cotas superiores de calidad. Al momento de construir un nuevo lanzamiento de estudio, lo cierto es que Arjen meditó mucho sobre qué dirección tomar y finalmente se decidió por escribir el guión y la música para una película. Sí, un largometraje dramático de época con elementos sobrenaturales que lamentablemente no pudo ver la luz, en gran parte por la pandemia que ha parado al mundo por completo durante 2020.

Por sugerencia (¿o mandato?) del sello discográfico, quienes notaron que la música y la historia tenían muchos elementos en común, finalmente se decidió lanzar este trabajo bajo el nombre de Ayreon. Y si todo este preámbulo suena un poco confuso y traído de los pelos, es porque quería mostrar que así se siente “Transitus”, un álbum de Ayreon que tiene todos esos ingredientes que nos gustan y nos hacen sentir en terreno familiar, pero que no terminan de cerrar y nos dejan con ganas de más, mucho más.“Transitus” es un disco con buenas ideas y canciones, pero que lamentablemente recicla demasiado de trabajos previos de Arjen, y la historia, que supone siempre un punto alto en estos álbumes, termina por volverse totalmente predecible, sin ningún giro en la trama de esos que solían dejarnos con la boca abierta.

Vayamos entonces por partes y analicemos entonces este primer factor: la narrativa conceptual. Sabemos que “Transitus” fue concebido como una posible película, pero al truncarse adquirió un formato no sólo de álbum musical, sino también de un cómic que viene acompañando al disco en sus formatos especiales. Esta historieta es fundamental para meterse en la piel de los personajes y en una historia que al principio cautiva pero que lamentablemente se vuelve intrascendente a medida que avanza. Como pequeño resumen les cuento que nos situamos en el año 1884, donde conocemos a Abby (Cammie Gilbert, Oceans of Slumber) y Daniel (Tommy Karevik, Kamelot), una pareja de diferentes clases sociales y razas que entablan un amorío para desdicha de la familia pudiente de Daniel. Todo comienza con un hecho trágico que no vamos a spoilear, pero que desata una trama con elementos sobrenaturales que incluye viajes en el tiempo y el mundo espiritual entre la vida y la muerte. Al final, la trama se resuelve como esperamos desde la mitad del disco y nos hacen falta esos giros inesperados y finales sorpresivos por los que Ayreon siempre fue conocido. La historia cumple, atrapa y nos mantiene entretenidos, pero carece de ese factor sorpresa y esos desenlaces magníficos por los que Arjen se ganó nuestro corazón.

Si nos movemos al territorio musical, hay mucho para descubrir y disfrutar en este disco, no es que sean todas malas noticias, solo que el factor sorpresa sigue estando ausente y en pocos momentos de los 80 minutos que dura “Transitus” nos llegamos a sorprender. Hay partes muy interesantes, el track inicialFatum Horrificum’ (y el más largo, con 10 minutos de duración), es una perfecta introducción a la historia y los personajes, con especial énfasis en la narración de la leyenda británica Tom Baker, un actor histórico y uno de los ídolos de Arjen, quien pudo darse el gusto de contar con él para relatar esta historia tan macabra. El resto de los tracks son mucho más breves, siguiendo un formato de “rock opera” con actos y secciones bien definidas y que muchas veces no terminan de desarrollarse debidamente.

Hay algunas canciones que destacan: ‘Listen to My Story’ es una introducción al personaje del Angel de la Muerte (Simone Simons de Epica) y sus “furias” (Marcela Bovio y Caroline Westendorp), una canción que suena fresca, divertida y con un aire cabaretero que acerca su sonido a propuestas más fiesteras como Diablo Swing Orchestra. La participación de Simone es genial y se muestra entretenida probando un tono diferente al que nos tiene acostumbrados. ‘Talk of the Town’ nos introduce a Henry (Paul Manzi de Arena), el hermano celoso de Daniel (un paralelo casi exacto de otros personajes “rivales” como puede verse en ‘The Human Equation’ o ‘The Theory of Everything’), y la canción entretiene y se destaca por los vocales poderosos de Manzi, pero su estribillo es demasiado calcado al de ‘Digital Rain’, aquel temazo perteneciente al segundo disco de Star One, ‘Victims of the Modern Age’ (2010) (que además está muy inspirado en el clásico de Rainbow, ‘Stargazer’).

Los números rockeros y más directos tampoco pueden faltar, y allí tenemos a ‘Get Out! Now!’, un hitazo y el segundo single que conocimos, con la participación de Dee Snider (Twisted Sister) quien es instantáneamente reconocible y vuelca sus décadas de experiencia en una canción pesada y bien retro. Su personaje es el clásico “padre odioso” del universo Ayreon, otra característica que comparten todas las figuras paternas en las historias de Arjen. También tenemos ‘Dumb Piece of Rock’, una canción extraña y bastante tonta que desaprovecha las enormes capacidades vocales de Mike Mills (Toehider), un alumno ayreonauta de la “nueva escuela” que probó ser indispensable pero acá se siente forzado y poco aprovechado en una canción de aire folky distendida pero muy simplona.

Los verdaderos protagonistas, tanto en la historia como destacándose vocalmente, son Tommy Karevik y Cammie Gilbert. De Karevik ya sabemos que tiene la capacidad de sobra para conmover, emocionar y ponerse en la piel de los personajes como ya se vio en los últimos discos de Ayreon, pero la verdadera revelación es Cammie, cuyas vocales sombrías y dramáticas nos llevan al mismo cielo, al infierno y claro, al “Transitus”, ese limbo intermedio. Su performance es digna de alabanzas (y más aún teniendo en cuenta que hace pocas semanas se editó el nuevo disco homónimo de Oceans of Slumber, considerado por muchos uno de los discos del año). La química entre ambos vocalistas se siente muy latente en todo el disco, especialmente en números como ‘Hopelessly Slipping Away’, una hermosa balada etérea y ambiental que termina demasiado rápido, o el cierre con ‘The Great Beyond’, aunque es un final que se siente apresurado y abrupto.

Otros vocalistas que están presentes pero brindan performances intrascendentes y/o poco aprovechadoras de potencial son la últimamente ausente del mundo musical Amanda Somerville (Avantasia), de quien lamentamos una participación tan breve y poco memorable, y el relativamente desconocido Johanne James (baterista de Threshold, acá como vocalista), que no destaca demasiado en un papel breve y olvidable como el padre de Abby. En total hay 22 canciones en el disco, pero muchas actúan como interludios o puentes entre una pieza narrativa y otra, por lo que el dinamismo y la cohesión suelen fallar al haber tanta división entre pistas. Esto también hace que no nos acordemos de determinados pasajes más allá de las “canciones completas” propiamente dichas.

Todo esto no quiere decir que “Transitus” no pueda disfrutarse, al contrario, estaremos enganchados y entretenidos la mayor parte del tiempo. Sólo que con Arjen Lucassen estamos acostumbrados a la excelencia y eso acá no ocurre, hay mucha falta de originalidad, mucha repetición y conceptos reciclados, una historia con un desenlace muy pobre y algunas de las composiciones más olvidables en la carrera del holandés. Por todo esto debemos decir que “Transitus” se ubica como el álbum más flojo de Ayreon (decir “el peor” suena feo, pero sí, sería el peor). Lo vamos a escuchar, disfrutar, olvidar y pasar la página, prontos para el próximo proyecto que nos vuele la cabeza. Ahora sí, Arjen, todas las pilas puestas para ese nuevo álbum de Star One que tanto quieres hacer.


Sello: Music Theories Recordings
Lanzamiento: Septiembre 25, 2020
Género: Progressive Rock, Progressive Metal

CD1
1. Fatum Horrificum
2. Daniel’s Descent Into Transitus
3. Listen To My Story
4. Two Worlds Now One
5. Talk Of The Town
6. Old Friend
7. Dumb Piece Of Rock
8. Get Out! Now!
9. Seven Days, Seven Nights

CD2
1. Condemned Without A Trial
2. Daniel’s Funeral
3. Hopelessly Slipping Away
4. This Human Equation.
5. Henry’s Plot
6. Message From Beyond
7. Daniel’s Vision
8. She Is Innocent
9. Lavinia’s Confession
10. Inferno
11. Your Story Is Over!
12. Abby In Transitus
13. The Great Beyond

AYREON - Transitus

“Transitus” se ubica como el álbum más flojo de Ayreon. Lo vamos a escuchar, disfrutar, olvidar y pasar la página, prontos para el próximo proyecto que nos vuele la cabeza. Esto no quiere decir que “Transitus” no pueda disfrutarse, al contrario, estaremos enganchados y entretenidos la mayor parte del tiempo. Sólo que con Arjen Lucassen estamos acostumbrados a la excelencia y eso acá no ocurre, hay mucha falta de originalidad, mucha repetición y conceptos reciclados, una historia con un desenlace muy pobre y algunas de las composiciones más olvidables en la carrera del holandés.
7.5

Producción

8.1/10

Composición

7.3/10

Replay Value

7.4/10

Valoración Personal

7.2/10

Alejandro Melgar

Absoluto entusiasta del Metal en casi todas sus variantes y sub-géneros. Melómano, coleccionista de discos y experto en armar documentos, listas y rankings. La estructura me garantiza paz y organización. Amo las series, películas y estoy muy arraigado en la cultura pop, además de disfrutar la naturaleza y el aire libre. Y a pesar de todo esto, soy muy sensible.