CONFIDENTIAL 🇳🇴 – Devil Inside (Album Review)
Por Michael Prado
Qué grande es ver a músicos con ambición y sueños, esos que sin importar que ya tengan un proyecto sólido y prometedor, se embarcan a probar oportunidades con un nuevo proyecto. Ese es el caso que tenemos con el señor Frode Hovd, quien, no satisfecho con lo conseguido en su proyecto de Opera Metal llamado Aldaria, ha decidido iniciar una aventura más en compañía de 3 músicos con los que buscará dar de qué hablar en manera muy positiva.
Cuando me refiero en estos términos, lo hago concerniente a la agrupación de Symphonic Metal noruega de nombre Confidential, la cual nace en el año 2020 (3 años después del LP debut de Aldaria, “Land Of Light” (2014)), y en su alineación comprende, además de Hovd (quien se encargará de las guitarras) a la cantante Astrid Klara Mjøen, el también guitarrista David Hovde y la teclista Charlotte Stav. Dicha formación tiene preparado para este próximo 25 de marzo a través del sello Massacre Records su primer larga duración, que se llamará “DEVIL INSIDE”. Las sensaciones que nos deja este disco son de ver un Sympho Metal con voz de mujer que, afortunadamente, no cae en el cliché de una cantante lírica, sino que Astrid aporta algo más distinto a lo que suele verse en este tipo de música.
El disco arranca con algo que, siendo sinceros, como que sale sobrando en muchos álbumes (y debo decirlo, aunque no guste, este caso no es excepción a ello), y es un intro orquestado, que lleva el nombre de “Prelude To Resurrection”. Vamos, que ya esto se ha vuelto demasiado formulaico y sin ningún chiste. Aparte, ningún intro de este tipo ha logrado superar lo que en mí dejó hace 17 años ya el sublime “Volaverunt Opus 666” del “Gaia II: La Voz Dormida” (2005) de los españoles Mägo de Oz. Creo que o mejor buscan hacer un opening que de veras impacte, o vamos al grano con el contenido real del álbum.
Un coro de estilo gregoriano nos da la bienvenida ya a lo que es el disco en sí, con la pieza intitulada “Devil Inside”, tal cual el álbum, y que aparte fue el primer single promocional. La pieza nos presenta un número cargado de melodía y un buen trabajo de la batería (ejecutada por el músico invitado Robert Redmax Myrhaug de las bandas Memorized Dreams -de la cual Frode formó parte en su momento-, Slagmaur y Tragediens Trone), además de ciertas melodías arabescas de background, mientras la voz de Astrid (que por momentos nos recordará ciertos performances de cantantes como Elisa C. Martín, Sharon den Adel o Noora Louhimo) nos lleva por la senda lírica de manera acorde. No será la canción más bombástica en este género, pero cumple de manera competente para iniciar el álbum y ser la primera muestra de lo que este cuarteto buscará explorar con su arte.
El cantante Peter Niklas Joakim Lundberg, mejor conocido en el mundo artístico simplemente como “Jake E” (miembro de Cyhra y Dreamland, y ex integrante de los populares Amaranthe), une fuerzas con Confidential para la canción “Salvation”, que inicia con una coral de sopranos muy etérea, para pasar de lleno a lo que nos propone esta canción, que no tendrá la misma velocidad que la anterior (la cual tampoco era muy veloz que digamos), pero tiene la gran interpretación vocal tanto de Jake como de Astrid, quienes se complementan de forma bastante elegante, algo que se puede percibir sobre todo al llegar al estribillo de la pieza.
El piano siempre es un elemento que aparecerá de manera inevitable en los discos de este subgénero del Metal, y en “Forever Angel”, la primera balada del álbum, será la que dicte la senda a seguir, en una emotiva interpretación por parte de la señorita Astrid Klara Mjøen, quien hace lujo de los tonos más dulces y acogedores de su voz para un número conmovedor y evocador (algo que se acentúa con las notas que llora la guitarra de Frode Hovd).
Termina “Forever Angel” y la música prosigue sin detenerse para iniciar la elegante y más épica “Release My Symphony”, donde finalmente la banda suelta toda la artillería que había estado reservando, en lo que podríamos considerar sin ningún temor el punto más álgido y emocionante del álbum, donde la batería ataca con velocidad furibunda, el canto de Astrid es enérgico, las orquestaciones suenan con garbo embelesante, y un solo de guitarra mágico in extremis. En fin, creo que solamente por esta pieza ya vale la pena hacerse del disco.
Nuevamente el gran instrumento de 88 teclas da el punto de partida que es seguido por la orquestación (que por cierto, este elemento es creado en el álbum por Jonah Weingarten de Catalyst Crime, Echoterra y Pyramaze), la voz de Astrid y los violentos tamborazos de Robert, para otro número que rebosa hermosura y encanto mágico de Symphonic Metal como lo es “Historia”, que va más en la sintonía de medio tiempo con momentos Speed Metal (quizás no con la velocidad de su predecesora, pero con ese doble bombo que tanto disfrutamos). El estribillo hay que decirlo, bastante etéreo y ecléctico.
El encanto gótico que tiene la escala de Mi Menor aparece en escena para la intrigante canción “Queen Of The Dark”, que inicia con el sonar del piano, acompañado por la elegancia del violín (cuando ambos elementos se conjugan, solamente podemos esperar magia). Si a esto le aderezamos la voz tan agradable de Astrid, podemos decir que tenemos otro número que será de gran disfrute. Esta pieza inicia con suavidad, pero va creciendo en su ritmo de manera progresiva y muy bien llevada, teniendo un primer solo de guitarra corto pero efectivo, para tras la repetición final del estribillo tener otro de similares condiciones.
La señorita Charlotte Stav ha sido encargada de abrirnos el pórtico con su instrumento de teclas a varias canciones, y dicha consigna se vuelve a dar en “Brother Of My Soul”, que, en forma muy parecida a “Queen Of The Dark”, tiene un inicio baladí y calmo, con otra soberbia interpretación vocal de Astrid. La pieza conserva ese sentir emotivo, aunque busca un tanto la senda rockera conforme avanzan los segundos. No dudo que esta será de las canciones que haga que en concierto el público alce los encendedores para acompañar a la banda en su interpretación.
El elemento de la orquesta no ha tenido tanto peso para el grupo, pero cuando lo usan, de veras que es un complemento muy acorde a la propuesta artística de estos noruegos. Prueba de ello lo tenemos en “Prophecies”, donde otra creación de este estilo por parte de Jonah Weingarten nos da la bienvenida a dicha canción, que inicia en plan medio tiempo y se va desenvolviendo poco a poco en un formato más heavy y con el que muchos terminarán con la melena un tanto despeinada siguiendo el ritmo constante de la pieza. Punto aparte para el sobresaliente solo de guitarra, otro de los puntos más altos en esta placa.
Piano y orquesta se conjugan nuevamente (ahora acuerpados por la flauta) en “My Evermore”, que es el bonus track en el álbum. Nuevamente tenemos un número lleno de melodías en un ambiente tranquilo y apacible, que es invadido por la labor en la batería del señor Robert Redmax Myrhaug a partir del minuto 2. Quizás algunos se quejarán de que 3 baladas es demasiado para un disco del género Metal, pero en mi caso particular no me quejo, siempre y cuando sean disfrutables (lo cual dichosamente ocurre en el caso que nos concierne). Aparte, la pieza crece en su ritmo ya al final, dejando un todavía mejor sabor de boca.
Nos acercamos al final de este disco, y esta sería la estación #11 de este hermoso viaje musical. Dicha parada lleva el nombre de “My Kiss Of Death”, y su inicio me trajo de unas a la memoria lo que ya he oído antes en la gloriosa “The Poet And The Pendulum” que procede del tremendo y lamentablemente infravalorado álbum “Dark Passion Play” (2007) de Nightwish, es más, la pieza trae varias reminiscencias de ese gran disco, sobre todo siendo quizás la que pone mayor preponderancia al sonido de la orquesta combinada con el magistral quehacer de los músicos. Mas con todo y todo, también podemos decir que es la pieza que trae más número de matices diversos y variados. En definitiva, es otro de los momentos más sublimes del disco. Esta canción tiene la participación de los músicos invitados Rikard Ekberg de la banda Eleine en la narración y el batero Morten Gade Sørensen de Anubis Gate, Pyramaze y Wuthering Heights.
El inicio de la canción final del álbum, “Black Angel”, resulta un tanto similar al de la inicial “Devil Inside”, pero la intencionalidad va por una senda distinta. En esta pieza aparecerá como artista invitada la cantante Ingrid Madeleine Liljestam, más conocida como “Eleine”, haciendo un dueto vocal simplemente sublime con Astrid. Nuevamente una vorágine tremenda de matices diversos en menos de 4 minutos son lo que tendremos en esta canción, que aparte tiene una participación más de Rikard Ekberg, esta vez con su guitarra. Un cierre mágico y soberbio para un álbum que rebosa elegancia y majestuosidad.
En el rubro de la producción debemos decir que por fortuna el álbum ha sido muy bien gestado, con un sonido cristalino y contundente, tal y como se lo merecen obras de este subgénero. Otro gol más que se anota a su lista de aciertos el veterano productor Jacob Hansen.
Las sensaciones finales que nos deja el disco son muy buenas, y debemos decir que dichosamente Frode sigue con la buena estela que inició con su proyecto Aldaria. Sé muy bien que mucha gente ya está embotada de este tipo de Metal, pero discos como éste, creo yo, se merecen al menos una oportunidad, sobre todo por el trabajo que los músicos han invertido en ello. Una linda propuesta que inició algo dubitativa, pero que con el paso de las canciones fue asentándose mejor, brindándonos un resultado final sólido y de mucho disfrute.
Sello: Massacre Records
Lanzamiento: 25 de Marzo, 2022
Género: Symphonic Metal
«All Eyes On Me» tracklist:
CONFIDENTIAL – Devil Inside
Noruega se ha vuelto un país que no se ha quedado encasillado en su pasado Black Metalero, y hoy día aporta propuestas muy diversas, como lo tendremos en este disco de Symphonic Metal que tiene canciones muy interesantes y una producción que le da un realce bastante distinguido. Fans de las divas metaleras, no lo dejen pasar.
