THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA – Give Us The Moon (Album Review)

Por Carolaina Laredo

Alineación:

• Björn Strid – Voces
• Sharlee D’Angelo – Bajo
• Jonas Källsbäck – Batería
• Sebastian Forslund – Guitarra, Percusión
• John Lönnmyr – Teclados
• Rasmus Ehrnborn – Guitarra
• Anna Brygard  – Coros
• Åsa Lundman  – Coros

The Night Flight Orchestra es un proyecto creado en 2007 por Björn Strid y David Andersson, miembros de la banda de Heavy Metal y Progressive Metal Soilwork. Ellos se unieron a integrantes y ex integrantes de otras bandas consagradas dentro de géneros como el Heavy Metal y el Death Metal como Mercyful Fate y Arch Enemy.

De esta forma, los músicos decidieron conformar un proyecto alternativo y distinto a lo que venían tocando hasta ese entonces, creando así a The Night Flight Orchestra, una banda con sonido con reminiscencias a los ´70 y los ´80, dedicada principalmente al AOR, pero también tomando elementos de otros géneros como el Hard Rock, el Progressive Rock e incluso el funk.

The Night Flight Orchestra, como su nombre nos adelanta, tiene elementos orquestales, ya que cuenta con, por ejemplo, una presencia importante de teclados, percusión y coristas. En cuanto a la propuesta estética y lírica, los músicos se “lookean” como si se tratara de miembros de una tripulación aérea. Sus fotografías, portadas de álbumes y escenografías también rondan en torno a la temática de las aeronaves.

Sus canciones, en líneas generales, son divertidas, enérgicas, tienen sonidos “retro” y abarcan temáticas como viajes, historias reales, amor, desamor, entre otras. Es por ello que, por ejemplo, varias de sus canciones remiten a viajes, vuelos ciudades turísticas, tales como Moonlight Skies (2021), Star Of Rio (2017), Turn To Miami (2018), entre otras.

En el álbum Give Us The Moon (2025) encontramos tracks que, en líneas generales, siguen la propuesta de álbumes anteriores: canciones divertidas y eclécticas que, en ocasiones, incluso nos invitan a bailar, melodías pegadizas y líricas que contienen referencias a viajes aéreos y destinos turísticos.

ANÁLISIS TRACK-BY-TRACK

El álbum se inicia con la introducción denominada Final Call, que, básicamente, consiste en una empleada de aeropuerto haciendo una última llamada a los miembros de la banda para que no pierdan su vuelo. Con esto, nuevamente, la agrupación nos muestra que nos embarcaremos junto a ellos en un nuevo viaje, a través de canciones y sonidos bajo las temáticas líricas y sonoras ya mencionadas anteriormente.

La canción que da inicio al álbum es Stratus. La misma comienza con diferentes sintetizados, acompañados de sonidos de percusión y la base eléctrica, siendo una canción alegre, que en ningún momento pierde su intensidad y su energía. Por supuesto tenemos en las voces a Björn cantando de manera enérgica, acompañado de los coros de Anna y Åsa.

Cabe agregar que el término Stratus proviene de la meteorología y es utilizado para referirse a nubes horizontales, bajas y que suelen contener lluvia, lo cual nos trasmite la sensación de que un avión y sus pasajeros están elevándose, como si los integrantes de la banda estuvieran despegando tras la última llamada. La melodía, alegre, trata sobre “elevarse” y sentirse mejor, dejando atrás las penas y el desamor, por lo que la analogía elegida resulta muy elocuente. De hecho, la canción termina con una azafata solicitando a los pasajeros permanecer en los asientos y relajarse, ya que se trata de un vuelo interesante.

El tercer track, Shooting Velvet, fue uno de los elegidos como corte de difusión del álbum. Es una canción ideal como corte, dado que comienza con una introducción de teclados pegadiza, seguida por las estrofas y un estribillo con un coro alegre donde se destaca la presencia de las coristas o aeromantics. Cerca de los tres minutos presenta solos de guitarra para, finalmente, cerrar la canción con el estribillo y la introducción de teclados. En pocas palabras, es una canción de cuatro minutos “ganchera”, estructurada y concisa.

Prosigue la canción Like The Beating Of A Heart, la cual es un poco más relajada, aunque no llega a ser considerada una balada. Es una canción que trasmite cierta sensación de tristeza, sin perder el glamour y la elegancia que caracterizan a las canciones de esta banda.

Comienza con unos sintetizadores retro, para continuar con un riff “pegadizo”, seguido por estrofas y un estribillo que, como ya se dijo, resultan más “tranquilos” y reflejan cierta tristeza. Cabe agregar que la canción cuenta con presencia de los coros y de la percusión. Cerca de los tres minutos, tenemos un breakdown con pasajes de sintetizadores y solos de guitarra. Finalmente, la canción cierra con el estribillo.

La quinta canción se denomina Melbourne, May I? por lo que aquí, nuevamente, tenemos referencia a los viajes. Es una canción veloz, en la que predominan los acordes de guitarra. Si bien no es de las canciones más “pegadizas” del álbum o, al menos en comparación de los dos tracks anteriores, se trata de una canción movediza que, incluso, nos invita a bailar.

Alrededor de los tres minutos, se alternan solos de guitarra y teclado, demostrando que este grupo, además de hacer canciones alegres, pueden demostrar virtuosismo en pasajes instrumentales, coqueteando incluso con el rock progresivo.

El sexto track, Miraculous, es una canción clásica de The Night Flight Orchestra. Es una canción donde están muy marcados el ritmo de la guitarra y el teclado, hay importante presencia de la percusión y los coros cobran importante protagonismo, resaltando el estribillo y algunos versos de las estrofas.

Hacia los tres minutos, tenemos un solo de teclado algo melancólico con un sonido típico del AOR, que, incluso, me recuerda al clásico de Journey, denominado Separate Ways. Es seguido por un solo de guitarra y el estribillo, demostrando nuevamente que la banda, al igual que muchas otras, prosigue una fórmula en sus canciones.

Prosigue la canción Paloma, la cual comienza con una introducción de teclados de corte “ochentoso.” Se trata de otra canción tranquila, aunque no llega a ser una balada. Es de matiz triste y por momentos casi épica, emotiva, ya que nos habla del desamor de una muchacha con ese nombre.

El octavo track, Cosmic Tide, posee un ritmo marcado por el teclado y, a mi criterio, resulta una canción que no me atrajo tanto. Es quizá la canción con versos más extensos, dejando poco espacio a las melodías y a los instrumentos. No obstante, cabe destacar que, es quizá, la canción en la que más se destaca el trabajo vocal de Björn, quien realiza importantes agudos al final del tema.

Es seguida por el track que da nombre al álbum, denominado Give Us The Moon, el cual, por cierto, también fue elegido como corte de difusión. La melodía principal es llevada a cabo por teclados, los cuales, además de presentar una melodía pegadiza, nos transportan en cierta forma al espacio exterior, creando una hermosa ambientación.

Se trata de una canción tranquila, con un estribillo que se repite una y otra vez y resulta “ganchero”. Se trata de una canción concisa y que queda resonando en la mente, por lo que es un tema ideal para dar a conocer el álbum y dar título al mismo.

El décimo track, A Paris Point Of View, es interesante, dado que comienza con teclados “ochentosos” que combinan sonidos de brass y chorus, para ser continuado por una melodía que tiene claramente influencias del funk. Se trata de una canción de desamor que, incluso, refiere a lugares turísticos y posee frases en francés, demostrando nuevamente el gusto de esta banda por hacer analogías a los viajes.

La canción posee nuevamente, cerca de los tres minutos, un solo de guitarra, para finalizar con el estribillo, demostrando nuevamente la fórmula que lograron en otros tracks del disco.

Casi finalizando el álbum, tenemos la canción Runaways. Es una canción algo más tranquila, aunque tampoco llega a considerarse una balada. Posee una melodía melancólica, donde el ritmo es fuertemente marcado por el piano eléctrico. Casi al final de la canción, tenemos un fade, en el cual las coristas se encuentran repitiendo versos, acompañadas por un solo de guitarra, brindándole a este track un final bello y a su vez triste.

La anteúltima canción, The Way To Spend The Night también se eligió como corte del álbum. Es una canción pegadiza, sencilla y concisa; posee una introducción marcada por los teclados y una melodía ganchera, cuyo estribillo se repite una y otra vez, con la voz del vocalista, acompañada por las coristas. Posee un solo muy breve de guitarra, para repetir nuevamente el estribillo al finalizar el track.

Finalmente, tenemos la canción  Stewardess, Empress, Hot Mess (And The Captain Of Pain. Es la canción más extensa del álbum, con una duración de 7:47 minutos y se trata de una pieza casi teatral, que combina AOR con rock progresivo. La misma comienza con los versos As I write these words I am up in the skies above…como si nos dieran a entender que ese vuelo con el que la banda comenzó el disco estuviera finalizando.

Se trata de una pieza de desamor, en la cual la melodía nuevamente es liderada por pianos sintetizados. Cerca de los cinco minutos, tenemos juegos de teclados típicos del sonido AOR, seguido por frases y repeticiones del estribillo de manera casi épica, dándole a esta pieza un final casi épico y dramático. La canción se pierde con un juego de acordes de piano sintetizado hasta finalizar de manera pacífica y melancólica. En pocas palabras, se trata de una gran canción para finalizar este trabajo.

CONSIDERACIONES FINALES.

En síntesis, se trata de un álbum en el que The Night Flight Orchestra nos muestra nuevamente su sonido característico y original, en el que combinan el AOR con elementos de Hard Rock y también coquetean con otros géneros, como el funk y el rock progresivo. De esta forma, la banda nos regala canciones en las que los teclados sintetizados suelen llevar la melodía principal, encontramos la voz potente de Björn exaltada por las coristas y tenemos más elementos como que acompañan como la percusión y los solos de guitarra.

Es un álbum divertido que, incluso, en ocasiones nos invita a querer bailar y posee algunas canciones pegadizas y otras que quizá no nos presentan melodías tan atractivas. Por lo tanto, es un  muy buen álbum, aunque no lo considero el mejor trabajo realizado por esta banda.

Para conocer mejor su discografía, aquí tenemos un shortcast con la historia y el álbum ranked de la banda llevado a cabo por Alejandro Melgar