FOO FIGHTERS – But Here We Are (Album Review)

Por Edwin Bejarano (Josias)

«But Here We Are», el undécimo álbum de Foo Fighters y el primero después de la muerte de Taylor Hawkins en 2022 , Grohl está luchando activamente con mantenerse en pie en estos momentos de oscuridad. Donde la banda no solo ha estado de luto públicamente por la muerte de Hawkins, sino que Grohl ha estado de luto en silencio por la muerte de su madre, Virginia Grohl, y aunque no ha habido un anuncio oficial, «But Here We Are» llega con una sincera dedicación a su compañero de banda y su madre.  A lo largo del álbum, Grohl reflexiona sobre el dolor y los mensajes que nos decimos a nosotros mismos: la tormenta pasará, nada bueno dura para siempre, todo lo que amamos envejecerá, pero nada de eso parece quedarse. Sin dudas, un disco que nace del corazon.

Este álbum es un recuerdo, un examen existencial y una declaración en voz alta de que todavía están aquí y todavía aman a su amigo. Incluso con Grohl regresando al trono de la batería de estudio, como lo hizo en los primeros dos discos de la banda, la gran pregunta musical es ¿qué tan diferente sonarán los Foos a partir de ahora?.

Antes de la muerte de Hawkins, Foo Fighters se estaba quedando sin fuerza, en especial su creatividad general se estaba agotando. «Concrete and Gold» de 2017 y «Medicine At Midnight» de 2021  encontraron a la banda atrapada en el medio, expandiendo su sonido solo de maneras que aún se sentían cómodas y seguras, sin desafiar realmente lo que podría ser una canción de Foo Fighters. Era el sonido de una banda que sabía que su dedicada base de fans no se inmutaría. Todavía venderían arenas y obtendrían reproducción de radio, su legado cementado e indiscutible.

«But Here We Are»  tiene más urgencia, significado y enfoque, obviamente diferente. Si uno estaba esperando un lado positivo creativo en la terrible muerte de Hawkins, era que los Foos serían despertados por su nueva realidad y encontrarían una nueva inspiración. Eso ha sido necesario durante años. Y la portada blanca y minimalista del disco, trata de reflejar la sencillez de como se presentan ahora: sinceros, dolídos pero aun presentes y llenos de esperanza.

El tema de apertura, «Rescued», es una declaración instantánea de que los Foos todavía están aquí, con un sencillo sencillo típico de power-pop y rock optimista. Todavía son rockeros consistentes que saben a dónde va un gancho vocal bien sincronizado y un cambio de tempo ocasional. “Under You” es pop sólido, con mucha autorreflexión y Grohl preguntándose si alguna vez saldrá de la tragedia, con letras enfocadas en superar la pérdida y cómo se recordará a su ser querido. Algunos días no sabe qué hacer, y canta así.

La tercera pista «Hearing Voices» mantiene algunos riffs de rock grandiosos y bien enfocados. «Nada como tú podría durar para siempre», se le da una ventaja en los procesos de duelo en lugar del escurridizo romance que podría surgir antes de la muerte de Hawkins. La canción principal “But Here We Are” suena como un poco de relleno musical, a pesar del tema de darle el nombre al álbum, intenta representar a alguien que se enfrenta a la realidad.

“The Glass” muestra la inevitable influencia de los Beatles de Grohl, que es una fórmula fiable a la que recurrir de vez en cuando.“Nothing at All” nos recuerda que todavía hay batería en una canción de Foo Fighters, incluso si Grohl regresa a este instrumento y trata de darle el protagonismo necesario, pero no tratando de pisar a nadie durante todo el disco. Es una canción pop simple, pero bien construida, que evolucionó hasta convertirse en un acto rockero divertido.

Incluir a Violet Grohl en “Show Me How” también agrega una hermosa capa de contexto. Grohl parece estar tranquilizando tanto a su familia como a él mismo mientras canta «Me encargaré de todo», una referencia a la carga que ha llevado, mientras que Violet parece estar tranquilizando a su padre con sus armonías delicadas y reconfortantes. Se contrasta con la poderosa balada «Beyond Me», en la que Grohl aboga por la comprensión, primero acompañada por la construcción del piano en otra progresión efectiva al estilo de los Beatles. «Está más allá de mí», se lamenta Grohl. “Debes liberar lo que amas”.

Y pasamos a la penúltima canción, una odisea de 10 minutos llamada «The Teacher», la profesión de su madre, y una dedicacion a ella. Que encuentra a Foo Fighters sonando más amenazante e incierto que en 25 años. Cuando la banda termina el primer estribillo, Grohl repite «Wake up» una y otra vez, y finalmente se convierte en un rugido a todo pulmón. Su inmediatez y dolor es evidente con cada llanto, llevándonos a su momento más desafiante y traumático. Una pieza sentimentalmente fuerte, que tienes que analizarlo liricamente. Y justo cuando crees que no pueden aportar más, los Foos cierran con «Rest», un mensaje emocional increíblemente crudo de Grohl a Hawkins. “Descansa, puedes descansar ahora/ Descansa, estarás a salvo ahora”, canta Grohl con tristeza, sobre una guitarra acústica sollozante.

Así que sí, todo el álbum es un tributo a Hawkins y en menor medida a la madre de Grohl. A veces es glorioso y energico, a veces es triste y oscuro, y a veces suena como los Foo Fighters de siempre, donde la música pasa a un segundo plano, y las letras toman el control y protagonísmo. Lo cual es genial, considerando dónde estaban hace un año. Nunca hubo ninguna duda real de que volverían, tal vez no con el mejor disco de su trayectoria, pero sin con un álbum personal, sentimental y contundente, donde Grohl demuestra ser el perro pastor del rock and roll: su energía es contagiosa, su trabajo es buenísimo y todos lo aman.

Miembros de la banda:

• Dave Grohl – Voz principal, guitarra, bateria
• Chris Shiflett – Guitarra
• Pat Smear – Guitarra
• Nate Mendel – Bajo
• Rami Jaffee – Teclados