Review Clásico: STRATOVARIUS – Eternal (2015)
Por Lestat Von Mondlicht
Bienvenidos a una nueva review en The Dark Melody. Hoy vamos a hablar de un álbum sumamente importante en la escena del power metal de los últimos tiempos, correspondiente a una de las bandas pioneras del género. Hablamos de los finlandeses de Stratovarius que, con su álbum «Eternal» rompieron barreras y unificaron conceptos de «lo nuevo» y «lo viejo».
Para meternos en su desarrollo, revisaremos brevemente su discografía, como es lo usual. Formados en el año 1984 por Tuomo Lassila, John Vihervä y Staffan Stråhlman como Black Water, son básicamente una de las bandas precursoras del power metal. Dos años después se renombrarían definitivamente como Stratovarius.
En los años previos al lanzamiento de su álbum debut «Fright Night«, en 1989, hubo cambios en la formación. Comenzando por Stråhlman siendo reemplazado por Timo Tolkki, además de la inclusión del tecladista Antti Ikonen, y el reemplazo de John Vihervä por Jyrki Lentonen, quien a su vez fue reemplazado poco tiempo después por Jari Behm.
En 1992 lanzan «Twilight Time«, álbum que los catapultaría internacionalmente. De aquí se desprenden canciones clásicas como «Break The Ice«. Tras su lanzamiento, el bajista Jari Behm es reemplazado por Jari Kainulainen, con el que grabarían su tercer álbum «Dreamspace«. Éste sería el último álbum que tendría a Timo Tolkki en guitarra y voces, pues a partir de aquí se dedicaría sólo a la guitarra, dando paso a Timo Kotipelto para que se encargase de las voces, cuyo debut se dio en 1995 con «Fourth Dimension«.
La combinación de música clásica con metal dio lugar a un álbum más exitoso que los anteriores. Tras esto, Timo Tolkki quiso ir por un camino más rápido y potente, dando como resultado la salida de Tuomo Lassila y Antti Ikonen, quienes serían reemplazados por Jörg Michael y Jens Johansson respectivamente. Con ésta, la formación más recordada de la banda, saldrían los mejores álbumes de su discografía, tales como «Episode» en 1996, «Visions» en 1997, «Destiny» en 1998, e «Infinite» del año 2000.
Luego de un período de inactividad, los finlandeses volverían al ruedo con un álbum doble titulado «Elements«, lanzado en el 2003. Álbum que traería variedad de críticas debido a la creciente experimentación en su sonido. Hacia 2004 llegaría una época bastante oscura para la banda, citándose los problemas psicológicos de Timo Tolkki, que lo llevarían a despedir a Kotipelto y Michael, reemplazándolos con una desconocida «Miss K» y Anders Johansson respectivamente. Tras limarse los conflictos entre Tolkki y sus ex–compañeros, hacia 2005 vuelve la agrupación original con un álbum homónimo.
Hacia 2008, sin embargo, se haría oficial la salida de Timo Tolkki de Stratovarius. Pese a que el guitarrista había anunciado su disolución, todo terminaría en que éste cedería los derechos del nombre a Kotipelto y cia., y posteriormente éstos grabarían hacia 2009 su álbum «Polaris«, introduciendo a Matias Kupiainen como nuevo guitarrista, así como a Lauri Porra como bajista en reemplazo de Kainulainen.
En el 2011 lanzarían «Elysium«, uno de los mejores álbumes de su nueva era. Canciones como «Infernal Maze» o «Under Flaming Skies» destacan fuertemente. Sería su último álbum con Jörg Michael como baterista, siendo reemplazado al año siguiente por Rolf Pilve, quien debutaría con el siguiente álbum, «Nemesis«, lanzado en el 2013.
Todo nos conduce a su decimoquinto álbum, «Eternal«, del año 2015. Como dijimos al comienzo, mezcla el estilo clásico de Stratovarius con su sonido moderno. El guitarrista Matias Kupiainen fue quien produjo el álbum. Consta de 10 canciones, de las cuales tres fueron compuestas por Timo Kotipelto junto a Jani Liimatainen, compañero de su banda Cain’s Offering y ex–miembro de Sonata Arctica. Como dato curioso: «Eternal» es el séptimo álbum de la banda en tener un título de 7 letras.
«My Eternal Dream» es el épico comienzo del álbum, recibiéndonos con el ritmo frenético de su época más clásica, mezclándola con matices innovadoras. Hacia la mitad nos sorprenden los descomunales solos de teclado y guitarra tan característicos de la banda. «Shine In The Dark» fue el primer sencillo. Con un estilo muy reminiscente a himnos como «Hunting High And Low» y una profunda letra, se refleja la atemporal esencia de los finlandeses.
«Rise Above It» sigue la línea de la mezcla old–new, con toques un tanto más agresivos. En «Lost Without A Trace» tenemos la primer power ballad del álbum. Única contribución compositiva del bajista Lauri Porra. Probablemente una de las canciones más emotivas en el mismo. «Feeding The Fire» nos muestra el costado más moderno con riffs más sencillos pero con power constante, además de con los usuales cambios de escala a lo largo de la canción.
Con «In My Line Of Work» tenemos un comienzo que va aumentando progresivamente hasta darnos de lleno con un potente riff que nos lleva a un ritmo frenético durante toda la canción, al mejor estilo del Strato más moderno. Un break a downtempo nos pone en clima previo al épico solo. «Man In The Mirror» presenta una intro con un sonido electrónico similar a lo que se vislumbra en canciones como «Halcyon Days«, de su antecesor «Nemesis«. Y aunque no sea tan rápida como otras canciones del álbum, se mezcla rápidamente con estribillos acelerados con baterías a todo lo que dan. En «Few Are Those» se percibe la mano compositiva de Kotipelto/Liimatainen, que exuda vibras de Sonata Arctica por parte de este último.
Hacia el final del álbum tenemos «Fire In Your Eyes«, con una intro melancólica de piano y la voz de Kotipelto acompañando, cuyo clima nos sugiere que estamos frente a la segunda power ballad, lo cual confirmamos en cuanto estalla el resto de la banda. Nuevamente, hacia la parte del solo tenemos el despliegue de Kupiainen, proporcionando el climax de la canción hasta que todo termina igual que como empieza, con piano y voz.
Y finalmente, con «The Lost Saga» tenemos la canción más larga que culmina el viaje. Más de 11 minutos de pura epicidad, con múltiples matices que enriquecen esta compleja composición. Desde su intro lenta con arreglos corales, pasando por riffs virtuosos en un despliegue descomunal, hasta su épico final que desemboca en solemnes arreglos corales, sin mencionar su emotiva sección media con atmósfera más lenta, con guitarras lead que calan profundo. Definitivamente una de las mejores canciones de todo el álbum.
Por lo tanto, a modo de conclusión, diremos que «Eternal» es sin duda el testimonio por excelencia de los finlandeses de que su chispa power sigue más latente que nunca, habiendo sido capaces de aunar lo mejor de dos épocas tan distintas estilísticamente en un único y magnífico sonido que, aunque no sea tan icónico como su era dorada, sin duda trascenderá en el tiempo no sólo como uno de sus mejores álbumes, sino del power metal en general.
Aquí abajo tendrás los links para escucharlo. Puedes dejar en los comentarios tu opinión sobre el álbum. ¡Nos encantará leerte!
Sello: earMUSIC
Lanzamiento: Septiembre 11, 2015
Género: Power/Symphonic Metal
Stratovarius - Eternal
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9/10
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9.5/10
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9.2/10
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9/10
Un álbum que funge como testimonio por excelencia de que la chispa power de los finlandeses sigue más latente que nunca, habiendo sido capaces de aunar lo mejor de dos épocas tan distintas estilísticamente en un único y atemporal sonido.