SAVAGE GRACE – Sign Of The Cross 🇺🇸 (Album Review)

Por Michael Prado

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Bueno, si de regresos tras años de no lanzar nada de material en estudio se refiere, en los últimos años hemos tenido muchos interesantes (Freternia, Possessed, Sanctuary, entre otros), y bueno, para esta oportunidad, la banda en cuestión llevaba la impresionante cantidad de 37 años (la misma edad de quien escribe estas líneas) sin presentar un nuevo larga duración (previamente había tenido 2 EPs, uno en 1987 y otro en el 2010).  Por dicha, el líder del grupo pudo reunir al suficiente personal para una nueva iteración discográfica.

Procedentes de Los Angeles, California, SAVAGE GRACE es una agrupación de Heavy/Speed Metal que lidera el extravagante guitarrista y cantante Christian “Chris” Logue desde su fundación bajo el nombre de MARQUIS DE SADE.  Durante su primera etapa, grabaron 2 EP y 2 LP que hoy día son considerados clásicos de culto dentro del Heavy estadounidense.  Posteriormente, en 1989 se trasladaron a New York para hacer música más enfocada en un estilo Hard Rock, pasando a una primera disolución en 1992.

Posteriormente, el grupo tuvo una reapertura temporal del 2009 al 2010, para retomar nuevamente actividades en serio en 2020, en donde, para el día de hoy, Savage Grace cuenta, además del señor Logue (conocido por ciertas situaciones bizarras de su vida, como dirigir centros médicos de calidad cuestionable y manejar una compañía de películas para adultos), con el vocalista puertorriqueño Gabriel Colón (quien también canta en The Culprit y Lynch Mob, además de estar en el pasado con Fast Taker), el bajista brasileño Fabio Carlito (miembro de Pastore, Suprema, Trend Kill Ghosts, Instincted y la banda en vivo de Ripper Owens, además de haber sido parte de Addicted to Pain, la banda solista de Warren Dane, Furia Inc, Shadowside y los directos de Roland Grapow) y el baterista paulista Marcus Dotta (cuyos tambores también retumban en Hatematter, About2Crash, Gaijin Sentai, Heaven and Hell -banda tributo a Dio– y tener experiencia en vivo con muchas bandas, sobresaliendo las bandas solistas de Ripper Owens y Grapow).

Con esta alineación ya bien asentada desde el 2022 (año en el que Colón se integra al grupo), dan el disparo de partida para lograr concretar finalmente el tercer álbum de estudio de esta agrupación, hecho que finalmente testificará el público en general cuando “SIGN OF THE CROSS” finalmente haga su aparición en las tiendas musicales y servicios de streaming el día 5 de mayo del presente año.

Históricamente el grupo nos ha traído música de riffs potentes, tempos de velocidad enloquecedora y cantos poderosos, algo que se mantiene para este lanzamiento (cosa que suele preocupar a algunos fans cuando sucede un regreso de alguna agrupación que lleva décadas sin presentar material nuevo, que temen por la pérdida de algún elemento musical sobre la marcha, algo que, por fortuna, no sucede acá, puesto que el señor Chris Logue tiene muy claro cuál es su norte artístico).

Claro, no todo va a ser machaque duro, poderoso y furibundo (como lo tenemos como carta de presentación en la agresiva inicial “Barbarians At The Gate” o la pesadita “Slave Of Desire”), también hay Heavy clásico bien labrado, como lo podemos presenciar con “Automoton” (la cual aparte fue el primer single extraído del redondo) o la también enérgica “Star Crossed Lovers”, momentos más diversos como los trae “Sign Of The Cross” y su algo elongado intro previo a la tremenda agitación metalera creada por Chris Logue, otras canciones con más sentimiento Hard Rock como “Rendezvous” o la más sensual “Stealin’ My Heart Away”.  En líneas generales, quien busque que en un disco no todo suene igual, saldrá contento con lo logrado acá.

En la parte interpretativa, podemos decir que cada uno de los músicos logra hacer su parte de la mejor manera, logrando un sonido que, gracias a la producción de Chris Logue y la mezcla y masterización por parte del mismísimo Roland Grapow, obtenemos un resultado que, si bien suena algo alto de volumen para mis estándares, tiene un saborcito a vieja escuela sin que eso signifique que no hubo trabajo y movida con el equipo moderno apropiado para la ocasión.

Quiero hacer hincapié en la excelente labor vocal de Gabriel Colón, quien simple y sencillamente se luce a cada paso del álbum con tremendos agudos que le van tan bien a este estilo musical, nunca cansando con lo que consigue en este rubro (dígolo sabiendo de amigos que no son muy tolerantes a un cantante que se dedique en su mayoría de repertorio a alcanzar tonos muy altos con gran frecuencia, algo que, por ejemplo, en casos como el de Avalanch sí terminan resultando algo incómodos a la larga).

Podemos cerrar esta reseña dando como veredicto final que la vena más heavy del metal norteamericano puede descansar tranquila, en tanto sigan surgiendo nuevas agrupaciones que han venido dando buenos pasos en este respecto (como casos que hemos revisado anteriormente en reseñas) y sobre todo, cuando actos del pasado cobran nueva vida y energías para retomar la actividad artística, como ha ocurrido con estos Savage Grace, quienes han trabajado con mucho ahínco para lograr una bonita experiencia musical que satisfará a los ávidos de Heavy bien veloz y aguerrido.