MEGADETH – The Sick, The Dying… and The Dead! (Album Review)
- 🎸 Thrash Metal, Heavy Metal
- 🌎 Estados Unidos
- 📆 2 de Septiembre, 2022
- 💿 Tradecraft/Universal
Por Alejandro Melgar
Tiempos turbulentos requieren medidas turbulentas. Si observamos la actividad (intencional y no intencional) del legendario cuarteto thrashero en los últimos años, veremos por qué esta nueva placa implica la espera más grande entre discos de Megadeth en sus casi 40 años de historia. Estábamos acostumbrados a aguantar no más de 3 años entre lanzamientos, pero una seguidilla de hechos bochornosos y/o trágicos retrasaron el lanzamiento de “The Sick, The Dying… and The Dead!” por varios años, generando tanto hype desmedido como incertidumbre y muchas dudas entre la fanaticada.
Repasando la historia reciente de la banda podemos destacar a “Endgame” (2009) como la mejor placa de sus últimos 15 años, mientras que esfuerzos como “Thirteen” (2011) y “Super Collider” (2013) (especialmente este último) se quedan a medio camino como placas descartables. Más adelante llegó “Dystopia” (2016), con la incorporación del eximio guitarrista brasileño Kiko Loureiro a sus filas, un álbum que nos devolvió la esperanza transformándose en un esfuerzo sólido y que trepó a varias listas de lo mejor del año (mía incluída).
Tras el ciclo correspondiente de presentación, todo estaba listo para que Dave Mustaine se enfocara en la composición y lanzamiento de su sucesor, y ahí es cuando se desató la desgracia: un cáncer de garganta puso en alto toda actividad y el colorado obviamente se concentró en superarlo, y por suerte podemos decir que quedó atrás. Entra 2020 y a menos que vivas en una burbuja, ya sabes qué pasó ahí en el mundo. Otro año perdido. Finalmente parecía que 2021 sería el año en que el esperado nuevo álbum vería la luz, pero entonces explotó la controversia: el eterno bajista David Ellefson era despedido de la banda por injustas y conocidas razones en las que no ahondaremos aquí, lo cual llevó a que sus partes para el álbum fueran regrabadas por el icónico Steve DiGiorgio (Testament). Las agujas del reloj no descansaron y nos encontramos en un nuevo año, y cuando queremos ver nos damos cuenta que pasaron 6 años de “Dystopia” y tras una espera eterna finalmente podemos decir que “The Sick, The Dying… and the Dead!” está entre nosotros. ¡Al fin!
Esta encarnación de Megadeth (…cuántas van?) se presenta como una de las más sólidas desde las épocas doradas de Marty Friedman. Tenemos al mencionado Kiko Loureiro soleando de manera exquisita y también contribuyendo en la composición; el baterista Dirk Verbeuren (con infinito currículum de bandas entre las que destacamos Soilwork o Devin Townsend), quien ingresó en 2016 pero este será su primer álbum con la banda, y en el bajo un viejo conocido como es James LoMenzo, quien había estado en Megadeth en el periodo 2006-2010, pariendo dos de sus joyitas modernas como fueron “United Abominations” (2007) y “Endgame” (2009). Un equipo con experiencia y destreza para inaugurar una nueva etapa (¿y tal vez una de las últimas?) de la sinfónica del colorado Mustaine y sus secuaces contratados. Y ya verán que la espera sí valió la pena después de todo.
Estamos ante un álbum que representa de la mejor manera todas las etapas de Megadeth, y por ende tiene todo lo que buscamos: Thrash Metal, actitud aguerrida, canciones más directas basadas en el Heavy más inmediato, letras contestatarias y reflexivas, una performance llena de sentimiento y técnica y una campaña de difusión que le hace justicia a la inmensa obra que hay detrás. Sin ir más lejos, cuando se empezaron a conocer los singles del álbum, se hizo a través de un corto cinematográfico de tres partes, cada una oficiando de videoclip para la canción representada. “We’ll Be Back” fue la primera, y nos dejó el hype por las nubes. Rápida, agresiva y sin misericordia, mostrando al Mustaine de dientes apretados escupiendo odio y tocando a mil por hora. ¡Qué manera de darnos el primer vistazo a un disco! Lo que no se entiende mucho es que se trata del último tema del disco, y nunca voy a entender a las bandas que largan como primer single lo que se supone que será la despedida del álbum.
El segundo de estos fue “Night Stalkers”, y otra vez nos volaron la cabeza con uno de los mejores temas de la placa. Una mini suite que tiene todos los elementos que nos enamoran de Megadeth: es furiosa e implacable, tiene una sección instrumental vertiginosa llena de solos de guitarra virtuosos, otra acústica introspectiva que desemboca en un final épico, y hasta cuenta con una participación del rapero Ice-T, que pudo asustar un poco a la gente cuando se anunció, pero no deja de ser más anecdótica que otra cosa, intensificando la narrativa pero de manera sutil. En el medio tuvimos “Soldier On”, que no entra dentro de esta mini película pero oficia de tercer single, mostrando el lado más accesible y hasta “cómico” del colorado, recordando las épocas noventeras de “Youthanasia” (1994) o “Cryptic Writings” (1997), donde el Thrash había quedado atrás. Está bastante por debajo de los otros temas mencionados, pero supone una escucha agradable de todas maneras.
La trilogía de videoclips finaliza con el tema título “The Sick, The Dying… and the Dead!”, otra canción memorable que se ubica como un híbrido Heavy/Thrash que recuerda a las etapas de inicios de los 2000, trazando un paralelo con aquella indispensalbe “Dread and the Fugitive Mind” de “The World Needs A Hero” (2001). La banda se saca chispas constantemente prendida fuego y generando una química musical intachable, probando ser una encarnación que quedará en la historia. En en lado más thrasher tradicional cuadradito tenemos “Life in Hell”, un tema acelerado y un tanto básico pero que nos hace cabecear como locos. La faceta más reflexiva y oscura aparece en “Dogs of Chernobyl”, con su comienzo épico y en plan acústico, deviene en un medio tiempo denso y pesado, recordándonos los horrores de aquel trágico incidente. Para su segunda mitad el Thrash rabioso toma protagonismo en una sección que nos quita el aliento.
Otros momentos a destacar incluyen “Killing Time”, agradable canción que si bien se vuelve un tanto repetitiva, muestra el lado más accesible y radial del colorado, con un estribillo que se te queda pegado a la fuerza. “Célebutante” arremete con un torbellino de Speed Metal energizante y prueba el amor que Mustaine le tiene a ese tipo de melodías influenciadas por el Punk Rock. Totalmente ochentosa y vibrante, otro ejemplo de la variedad que encontramos en el álbum, y una de las más divertidas y adrenalínicas. “Mission To Mars” tiene una estructura un tanto básica pero nos gana el corazón con su cadencia Hard Rockera y su groove de guitarras accesibles. Cuando vemos que va terminando el álbum y se nos dibuja una sonrisa en el rostro, sabemos que todo (o casi todo) está en su lugar y Megadeth no ha decepcionado, lejos de eso.
En el lado negativo podemos citar algunos temas que se vuelven un tanto irrelevantes como “Sacrifice”, “Junkie” o el interludio “Psychopaty”. Los covers de Dead Kennedys y Sammy Hagar son divertidos pero no dejan de ser Bonus Tracks por fuera de la calidad del resto del álbum. Varias canciones se basan en una repetición de estribillos y secciones que pueden tornarse cansadoras a la tercera o cuarta escucha, el sentimiento general de una espera que se tornó eterna, pero eso es un detalle menor cuando vemos la calidad del producto final.
“The Sick, The Dying… and the Dead!” está lejos de ser el mejor álbum de Megadeth, de hecho no llegó a entrar en mi Top 5 (si quieres ver donde quedó ubicado en el ranking, te sugiero entrar a este Albums Ranked de Megadeth, que ya fue actualizado reflejando esta última placa), pero sí podemos decir que se trata de un álbum sólido, variado y consistente que se siente bastante parejo con “Dystopia” en términos de calidad general, volviéndose una dupla de discos muy recomendable. La banda se muestra en gran forma y con una química espectacular, las canciones tienen esa pizca de magia y el sello del colorado a fuego, y podemos decir que después de tantas subidas y bajadas, la casa está en orden. Solo quiero dos cosas: no esperar tanto tiempo para un próximo álbum, y que varios de estos temazos se incorporen al setlist, ¡es tiempo de sacudir un poco las cosas y deshacerse de los muertos!
MEGADETH - The Sick, The Dying... and The Dead!
“The Sick, The Dying... and the Dead!” está lejos de ser el mejor álbum de Megadeth, de hecho no llegó a entrar en mi Top 5, pero sí podemos decir que se trata de un álbum sólido, variado y consistente que se siente bastante parejo con “Dystopia” en términos de calidad general, volviéndose una dupla de discos muy recomendable. La banda se muestra en gran forma y con una química espectacular, las canciones tienen esa pizca de magia y el sello del colorado a fuego, y podemos decir que después de tantas subidas y bajadas, la casa está en orden.Pros
- Representación fiel de todas las etapas de Megadeth
- Variedad en estilos y propuestas para una escucha vibrante y entretenidas
- Química musical exquisita para una de las mejores encarnaciones de la banda
- Producción cristalina que no sacrifica agresividad y muestra todo en su lugar
Cons
- Algunas canciones menos memorables que pasarán al olvido
- Repetición excesiva de algunos estribillos y secciones particulares