DRAGONLAND – The Power of the Nightstar (Album Review)

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Por Antonio Zamudio – AZ Journal

A lo largo de su respetable carrera, Dragonland nos ha transportado a sus propias tierras con la trilogía conformada por “The Battle of the Ivory Plains”, ”Holy War” y “Under the Gray Banner”, también conocida como las Crónicas de Dragonland. Ahora que están de regreso con esta odisea espacial, parecería que se alejan de su temática y estilo, pero eso no sería cierto, ya anteriormente nos maravillaron con “Starfall” y “Astronomy”, por lo que no es la primera vez que sus instrumentos apuntan al firmamento buscando la ferviente inspiración que destaca en cada entrega.

Siendo maestros en el arte de contar historias mediante la música, nos ofrecen un álbum conceptual cuya trama iremos conociendo a lo largo de doce temas. Mediante una introducción con segmento narrativo fomentan la inmersión, y arrancan fuerte cuando la batería de Johan Nunez abre para “A Light in the Black”, aunque su mejor momento interpretativo llegará con “Final Hour”, por lo que el inicio es perfecto para darnos tan solo una probada de lo que nos espera.

Lo primero que notamos al sonar “Flight From Destruction” es el dominio que Elias Holmild tiene sobre los teclados, algo que lo hará destacar en múltiples ocasiones y, siendo esta canción una de las primeras que escucharemos, se ha guardado lo mejor para quienes decidan quedarse hasta el final. Ese elemento que nos hace imaginar escenarios cósmicos en gran parte se debe a su talento.

Jesse Lindskog fue quien tocara la batería durante la primera década de la agrupación, no fue sino hasta el quinto álbum que se posicionó en una de las guitarras, por lo que estamos hablando de músicos experimentados y comprometidos con el proyecto, dispuestos a asumir el rol que sea necesario para plasmar su visión. Olof Mörck desde el comienzo se ha encargado de este mismo instrumento, a él quien debemos los alucinantes solos que han caracterizado a la banda y en esta entrega no está dispuesto a decepcionarnos.

Cuando conocí a Dragonland algo que me asombró fue la capacidad de Jonas Heidgert como vocalista, quedé impactado cuando en los primeros segundos de “Storming Across Heaven” mostraba su potencial. Ese mismo sentimiento de asombro continúa presente, lo supe cuando a veinte años de haber grabado ese tema, vuelve para lucir su capacidad al cerrar “A Light in the Black” de manera espectacular. Su voz va más allá de las notas altas, en piezas menos demandantes es capaz de embelesar al oyente para hacerlo imaginar lo descrito por sus versos; cualidad que pocos poseen, independientemente de la pulcritud de su técnica.

El disco presenta un buen balance con segmentos bien musicalizados. “Flight From Destruction” recrea un escenario devastador y justo después entra “Through Galaxies Endless”, un punto desolador en la historia, un viaje a la deriva con un destino incierto donde la música acompaña perfectamente la situación. “Aphelion”, el interludio instrumental, llega justo después de mi mención honorífica (“A Threat from Beyond the Shadows”), lo que da un espacio para asimilar lo que hemos escuchado hasta el momento, a la par que nos permite prepararnos para la segunda mitad. Por último, “Journey’s End” siendo la canción más larga, está situada justo al final.

Quizás uno de sus defectos es la duración, en lo personal doce temas (trece incluyendo el cover) que dilatan una hora, no me parecen demasiado porque disfruté cada minuto, sin embargo, puedo entender que alguien lo considere tedioso si no está lo suficientemente atraído por la historia o por el sonido, peor aún si anteriormente no disfrutó de los anteriores trabajos. También puede jugar en su contra la expectativa que puede generar nuevo material tras once años de ausencia; vale la pena aclarar que eso no significa que esos mismos años hayan sido dedicados a la concepción, composición o producción de lo que hoy podemos escuchar.

Aunque en lo personal habría preferido un capítulo más de las Crónicas, tampoco puedo decir que estoy decepcionado, «The Power of the Nightstar» es sin duda alguna un lanzamiento que destaca dentro del género. “Hope’s again been reignited”, dice la pieza homónima del disco, en mi caso, se trata de la esperanza de que la historia de esta gran banda se siga escribiendo con más álbumes maravillosos; no importa si es dentro de las vastas tierras de Dragonland o más allá de sus fronteras, lo voy a querer escuchar.

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