BASTIAN PER – Way Back Home (Album Review)
Por Alejandro Melgar
El convencimiento de que las bandas latinoamericanas pueden lanzar trabajos de igual o mayor calidad que sus pares europeos o norteamericanos es algo que hace años que quedó grabado a fuego. Ahora eso no quita que a uno no lo llene de orgullo cuando se escuchan trabajos de una calidad superlativa que hacen que te cuestiones de qué país proviene esta música, en qué estudio fue grabada o quien se encargó de la mezcla y la producción. Afortunadamente ese es el caso de Bastian Per, proyecto de Metal Progresivo que surge hace algunos años en Argentina y que hoy presenta su segunda placa de estudio “Way Back Home”.
Tuve el agrado de construir un dossier hace algún tiempo en mi anterior página, evaluando aquel magistral debut que fue “Epic Journey” (2019), del cual puedo rescatar mis primeras impresiones: “’Epic Journey’ ejemplifica el costado más versátil y accesible del ProgRock, sin perder cuota de virtuosismo y complejidad en las composiciones.“. Estos conceptos se mantienen y se magnifican en el excelente sucesor “Way Back Home” que tuvimos el gusto de analizar recientemente. La banda compuesta por Sebastián Prosperi en guitarra y vocales, Mariano Barreiro en vocales, Gabriel Kohout en teclados, Martin Sokol en bajo y Maximiliano Cataldi en batería se nota ajustadísima y afianzada a una propuesta que encantará a fans de bandas como Dream Theater o Haken, entregando performances dignas de elogio y mostrando el costado más versátil y cancionero de la música, así como el virtuosismo desmedido y la ejecución soberbia y detallada de cada tema, en un combo equitativo que se vuelve irresistible para el escucha.
Los fanáticos de Dream Theater encontrarán en esta placa infinidad de guiños, influencias y homenajes, que se ven desde la fantástica instrumental “Overture” (en lo que podría ser también un guiño a Neal Morse y sus miles de intros del mismo nombre), que se muestra potente, melódica y con múltiples cambios de ritmo, hasta la vibra rockera de “Defeat Device” que nos retrotrae a la época del “Falling Into Infinity” (1997) en un formato más directo y rockero en el que podemos también encontrar influencias setenteras como Deep Purple o Led Zeppelin. La introducción de una gran canción como “Through the Fires” me recuerda inmediatamente a aquel clásico moderno que es “Endless Sacrifice” (“Train of Thought”, 2003), con Gabriel Kohout canalizando a su Jordan Rudess interior y mostrando su admiración por el legendario tecladista. Una canción que sin dudas destaca, guiada por un estribillo potente a medio tiempo y un final a toda pompa de batería.
“The Lonely Shepherd” es otro tema a resaltar donde podemos encontrar una influencia marcada del primer Haken en teclados y atmósfera general, una canción que genera un ambiente más calmo y reflexivo (con un gran sonido de bajo), hasta que explota en un estribillo grandilocuente con excelentes vocales. La influencia de Haken también se siente en “Deadly Virus”, donde Mariano Barreiro suena como un interesante híbrido de su vocalista Ross Jennings y el mismísimo James LaBrie. Una canción que destaca en sus grandes solos de guitarra y teclado.
Obviamente también tenemos espacio para las baladas emotivas y ahí es donde aparecen “Seize the Day” y “The Safe Place”. La primera posee una bellísima intro de piano que se extiende hasta el éxtasis, recordándome nuevamente al gran Jordan Rudess en su faceta más relajada y solista, y luego es adornado con relatos de voz en off, algo que me trajo a la mente a aquel excepcional “Space-Dye Vest” (“Awake”, 1994), para culminar en un emotivo y brillante solo de guitarra. “The Safe Place” tiene también un hermoso comienzo de balada para luego transformarse en un prog más tradicional con un bombástico final épico.
En el apartado más experimental podemos encontrar “The Mystery Behind”, la canción extraña y bizarra del álbum llena de geniales solos de teclado y un sentimiento similar al de ser acechado por un villano de caricatura. Creo que es la mejor forma de describir el riff principal y sentimiento general de la canción. Y por allí también aparece “Greatness Delirium”, un instrumental bien rockero donde participa como artista invitado el genial Derek Sherinian (Dream Theater, Sons of Apollo), y cuya base oficia de caja de arena para que el eximio teclista juegue como quiera dibujando figuras de todo tipo y color, adornadas con un sonido tipo Hammond que calza genial para un track de este estilo más distendido y libre.
En un disco de mayormente temas cortos y directos, aparece finalmente esa épica autotitulada “Way Back Home”, el tema más largo del disco acercándose a los 9 minutos, un verdadero showcase de habilidades compositivas e interpretativas, representando toda la magia que engloba el disco y esta agrupación de músicos talentosísimos. Virtuosismo, emotividad, secciones instrumentales largas, muchos cambios de tiempo y sentimiento progresivo latente en una canción que representa perfectamente la esencia de Bastian Per y su mirada a un prometedor futuro.
Con “Way Back Home”, Bastian Per supera ampliamente al ya magistral debut, mostrando que desde latinoamérica el talento sobra y nada tiene que envidiarle a las bandas de mayor trayectoria y recursos. Hay mucho talento en este grupo de músicos que se demuestran su verdadera química sonora en un conjunto de canciones que harán las delicias de los amantes del Metal Progresivo en su faceta más directa pero también experimental. Una verdadera carta de amor a las influencias máximas del género, construyendo al mismo tiempo su propio camino, o tal vez el camino de retorno a casa.
Sello: Independiente
Lanzamiento: 12 de Junio, 2021
Género: Progressive Metal