Live Review: PHILIP H. ANSELMO & THE ILLEGALS en Montevideo, Uruguay
Por un momento parecía que todo estaba perdido y que los uruguayos habíamos abandonado la esperanza. Cuando Phil Anselmo anunció que se presentaría por primera vez en Uruguay en Febrero de este año, la alegría de los futuros presentes llegó a límites insospechados. El mítico frontman de Pantera es una institución y una pieza fundamental en el desarrollo del metal moderno, y poder tenerlo en un escenario local a pocos metros de distancia era una idea utópica en otros momentos.
El show originalmente estaba pactado para el 1 de Febrero, pero una imposibilidad logística hizo que tuviera que ser reagendado para dos días después. Al llegar la fecha y con Phil y su banda en Buenos Aires, nuevamente motivos logísticos impidieron el arribo a Montevideo, por lo que el show quedaba otra vez postergado, esta vez unos largos 6 meses hasta Agosto. Como era de esperarse, el público no reaccionó bien, las redes sociales explotaron de indignación, y mucha gente exigió la devolución de su dinero pese a que la producción aseguraba que el show se realizaría el 23 de Agosto y que las entradas mantenían su validez.
Adelantamos el tiempo hasta el presente y nos encontramos en la fecha pactada en un Montevideo Music Box prácticamente lleno, que tras una espera larga y agónica demostró estar a la altura de las circunstancias y cumplir con lo prometido. Phil Anselmo estaba en Uruguay y se estaba por escribir una nueva página en la historia metalera de shows internacionales para nuestro pequeño país.
A las 20 horas con una puntualidad impecable, los locales Apneuma subían al escenario para presentar un breve set de media hora basado mayormente en su más reciente trabajo “The Electric Hive” (2018). Gran muestra de musicalidad en su propuesta de Death Metal Técnico y Progresivo que entretuvo al público que de a poco iba llenando el lugar. Cabe destacar las enormes muestras de talento despachadas por sus virtuosos guitarristas Gabriel Ordeix y Sebastián Castañares. Puedes leer la entrevista que le hicimos a Apneuma hace unos meses siguiendo este enlace.
Tras una breve preparación de escenario, el segundo acto de apertura salía a la cancha a las 20:45, se trató de C.O.M.A., banda que practica un Groove Metal muy cercano a Pantera, y calzó perfecto con la propuesta de la noche. Un breve set contundente y con mucha actitud que animó a los presentes a incitar los primeros pogos de la noche, dejando el terreno bien caliente para lo que se estaba por venir.
Tras una espera que se demoró unos 25 minutos por sobre la hora estipulada, sobre las 21:55 se apagaban las luces y se daba el momento que todos esperaban. Una multitud enardecida que ya colmaba la totalidad del MMBox y se mostraba ya muy impaciente, explotó de alegría ante la presencia del icónico vocalista. Philip Hansen Anselmo derrocha personalidad, carisma y poder noventero. La sola aparición del frontman en el escenario fue suficiente para que todo se viniera abajo. No importó que la velada iniciara con sus poco recomendables trabajos recientes. No importó que las capacidades vocales de Phil estén sumamente limitadas. Tampoco importó mucho que hace pocos años un gesto antisemita le valió el repudio de la comunidad metalera durante un tiempo. Tenerlo ahí, de buen humor, mostrándose visiblemente conmovido por la convocatoria y la respuesta del público, todo eso generó un marco totalmente especial y saldó la deuda con los fanáticos uruguayos que esperaron tenerlo enfrente durante más de 20 años.
El arranque se compuso de cuatro canciones de su banda actual, Philip H. Anselmo & The Illegals, una propuesta mucho más extrema a lo que acostumbraba hacer en Pantera, más centrado en el Death Metal que en el Groove, con composiciones sucias y llenas de odio, y la voz de Anselmo desdibujando toda melodía. Sonaron algunas representaciones de sus dos álbumes de estudio “Walk Through Exits Only” (2013) y “Choosing Mental Illness as a Virtue” (2018). El público agitó y se estremeció como si no hubiera un mañana. El moshpit se estaba caldeando cada vez más mientras la gente exorcizaba sus demonios interiores. Un ritual para limpiar el alma.
La segunda y mayoritaria parte del set fue dedicada a lo que la gente realmente esperaba: los clásicos de Pantera. Y fue cuando arrancaron los primeros acordes de “Mouth For War” que realmente todo se vino abajo: el moshpit más asesino que haya visto en años se desató y ni un solo presente se quedó sin ser parte del revuelo. Hasta los que estábamos en los escalones del costado fuimos arrastrados a la turbulencia de uno de los hits más violentos del imprescindible “Vulgar Display of Power” (1992), al que le siguió “Becoming” del aún más visceral “Far Beyond Driven” (1994) . Anselmo se mostraba contento, contagiado de la ferviente respuesta del público, que cantaba cada estrofa con pasión desmedida.
Del disco final de Pantera, “Reinventing the Steel” (2000), sonó “Yesterday Don’t Mean Shit”, mientras el público aprovechaba a entregarle obsequios a Phil (hasta una bolsita de marihuana! Dimebag anyone?). Pero nada nos preparó para lo que se vendría. O mejor dicho, estábamos preparados, sabíamos que se venía, pero la respuesta fue inmortalizada con el pogo más catártico y liberador que se haya visto: sonó “Walk” en el Montevideo Music Box y fuimos testigos de un pedacito de historia metálica ante nuestros ojos. Anselmo apeló al recurso de hacer cantar al público, tanto por generar mayor interacción, como para no evidenciar que sus cuerdas vocales están lejos de ser lo que eran hace 25 años. Pero nada de eso importó cuando ahí abajo se estaba viviendo una fiesta indiscutida.
Tomando un respiro (a medias), el clásico “This Love” sirvió de hilo transitivo y generó un momento emocionante. Fanáticos de las primeras filas entregaban booklets de discos de Pantera y Phil se tomó el tiempo y la amabilidad de firmarlos en pleno set, gesto que fue agradecido por los presentes. Y cuando arrancó “Fucking Hostile”, esa oda a la violencia extrema, todo volvió a empezar y nos volvimos a meter en un huracán de codazos, piñas voladoras, empujes y saltos enfermos. El breve y visceral hit sonó más furioso que nunca, con una banda que se mostró correcta pero ajustada durante toda la velada. Los Illegals son el respaldo perfecto para que Anselmo se despache con soltura y se dedique a hacer lo suyo mientras confía en la base rítmica.
Para el final, y después de un pequeño medley que incluyó “Domination” y “Hollow”, nos quedamos con ese himno inmortal que fue “A New Level”, también del seminal “Vulgar…” (disco que tuvo más representación en la noche). Y ante promesas de futuras venidas, palabras de agradecimiento y extensos saludos finales, Phil Anselmo cerraba una noche para el recuerdo en Montevideo, en un 2019 que está siendo particularmente duro para la venida de artistas internacionales. Por eso se agradece el esfuerzo de producción para finalmente concretar esta visita, donde se logró que otro ícono del metal pise suelo uruguayo y nos recordó quienes fueron los reyes de los sonidos pesados de los 90. Solo bastó una vulgar demostración de poder para confirmarlo.
Philip H. Anselmo & The Illegals @ Montevideo Music Box, 23/08/2019
- Little Fucking Heroes
- Choosing Mental Illness
- Bedridden
- Walk Through Exits Only
- Mouth For War
- Becoming
- Yesterday Don’t Mean Shit
- Walk
- This Love
- Fucking Hostile
- Domination/Hollow
- A New Level
Live Review: Alejandro Melgar
Fotos: Damián Cejas Delgue