IHSAHN comparte el single «Twice Born» y los vídeos previos al lanzamiento de su nuevo álbum
IHSAHN ha lanzado el segundo single de su próximo álbum homónimo. «Twice Born» es una vorágine de metal sinfónico que continúa la historia conceptual del anterior single, «Pilgrimage To Oblivion«.
El nuevo álbum, titulado definitivamente IHSAHN, saldrá a la venta el 16 de febrero a través de Candlelight Records. El visionario noruego del metal progresivo se atreve a llevar aún más lejos el expresionismo creativo con su octavo trabajo de estudio, y lanzará dos versiones del mismo álbum interconectadas melódicamente: una prog metal y otra totalmente sinfónica, ambas creando una obra maestra con influencias cinematográficas.
El nuevo single va acompañado de dos vídeos, uno para cada versión (metal y orquestal). El vídeo de la versión metálica fue filmado por Shaun Hodson en Loki Films. Para la versión orquestal del tema, se ha creado un visualizador animado de Costin Chioreanu.
Sobre el nuevo tema, comentan:
«Este segundo single, ‘Twice Born‘, retoma la narrativa conceptual justo donde terminó el anterior, ‘Pilgrimage to Oblivion‘. Tanto la versión metálica de esta canción como la versión orquestal irán acompañadas de dos vídeos más, que continuarán las tramas argumentales. Musicalmente, esta canción es quizá algo más juguetona que ‘Pilgrimage To Oblivion‘, pero sigue la misma interacción de gritos, guitarras y orquesta».
Echa un vistazo a los vídeos de «Twice Born» y «Twice Born Orchestral» a continuación:
Aunque su viaje musical ha sido a menudo revelador, el magistral control del ritmo y el movimiento que se muestra a lo largo de «Ihsahn» muestra su trabajo como cantautor y compositor en su forma más centrada y segura de sí misma. IHSAHN afirma que «Ihsahn» es uno de los proyectos más complejos que ha emprendido nunca, una laberíntica madriguera que él mismo ha diseñado y cuya ambición se hace patente de inmediato. Totalmente autoproducido y grabado a lo largo de tres años, la versión metálica ha sido mezclada por Jens Bogren, la versión orquestal por Joel Dollié y ambas versiones han sido masterizadas por Tony Lindgren. IHSAHN admite libremente que el proceso le llevó a sus límites. Empezó, simplemente, con un piano.
IHSAHN comenta:
«Por término medio, desde que tenía 16 años he publicado un álbum de larga duración cada dos años. Y, ya sabes, eso me ha dado la oportunidad de explorar diferentes opciones, así que para mi octavo disco de larga duración en solitario, pensé, ‘vale, ¿cómo puedo hacer lo que hago mejor, pero también subir el listón diez veces? En el fondo, lo que hago es black metal, guitarras distorsionadas y gritos extremos, pero desde las primeras grabaciones de Emperor se oyen los teclados influidos por bandas sonoras clásicas de Jerry Goldsmith, John Williams, Bernard Herrmann, John Carpenter, etcétera. Así que abordé la composición con la intención de presentar el material en toda su expresión metálica, pero también de arreglar las partes orquestales de forma que funcionaran independientemente. De algún modo, era un intento de escribir una banda sonora dentro de las estructuras de la producción completa, lo que me permitía explorar variaciones diferentes, y a veces contrastadas, de esencialmente la misma música. Al final escribí toda la música como una partitura corta para piano y la arreglé para un conjunto típico de banda y orquesta, en consecuencia, asegurándome de que todo encajara».
Es ese núcleo compositivo el que permitió a IHSAHN construir los dos discos desde cero, una hazaña hercúlea para el músico autoproclamado autodidacta, pero es quizá esa misma ausencia de formación formal la que le permitió desechar el libro de reglas y seguir simplemente sus instintos, y el tiempo concedido por la pandemia creó el vacío natural necesario para invertir tanto en el proyecto. Como explica IHSAHN, esa presión autoinducida surgió del deseo de mantener el interés de su fiel base de fans y el suyo propio, que no sólo es el rasgo definitorio de su último disco, sino también la característica central de toda su carrera en solitario.
Reserva «Ihsahn» aquí.
Tracklisting:
«Cervus Venator»
«The Promethean Spark»
«Pilgrimage To Oblivion»
«Twice Born»
«A Taste Of The Ambrosia»
«Anima Extraneae»
«Blood Trails To Love»
«Hubris And Blue Devils»
«The Distance Between Us»
«At The Heart Of All Things Broken»
«Sonata Profana»
Y desde la grandiosidad orquestal del tema de apertura «Cervus Venator» -sea cual sea la cara de ‘Ihsahn‘ con la que elijas sentarte primero-, las cualidades épicas, de banda sonora y ricas texturas de Ihsahn son inmediatamente evidentes. Es una obra maestra se mire por donde se mire, y la expresión definitiva de las ilimitadas capacidades de IHSAHN como artista. Es un viaje con el que está deseando conectar con sus entregados fans.
Acompañan a IHSAHN en este álbum Tobias Ørnes Andersen y Tobias Solbakk a la batería y la percusión, con el hijo de IHSAHN, Angell Solberg Tveitan, añadiendo percusión adicional y violines de Chris Baum. Las ilustraciones del álbum son obra de Ritxi Ostariz, y todas las fotografías promocionales de Andy Ford.
No contento con crear un disco doble, también hay una historia conceptual que sustenta ambas partes de «Ihsahn«: un par de narraciones wagnerianas separadas pero entrelazadas que giran en torno al tradicional viaje del héroe, y aunque IHSAHN se muestra reticente a contarlo todo, confía en que pronto surgirá un significado para los oyentes dispuestos a mostrar el mismo compromiso.
«He tenido el honor de trabajar con algunos artistas visuales asombrosos, que han tenido acceso a mis álbumes de recortes, música, letras, historias, tableros de ideas, etc. Ha sido increíble ver cómo han interpretado el material de forma diferente, pero de una manera que lo une todo. Ha sido increíble ver cómo cada uno ha interpretado el material de forma diferente, pero de una manera que lo une todo».
«Es un privilegio poder hacer música y viajar por el mundo para tocarla. Y cuando digo que éste es subjetivamente mi mayor logro musical hasta la fecha, no tiene nada que ver con el ego o el prestigio, sino con la gratitud por la experiencia. El arte se nutre de la metafísica y los arquetipos de nuestra existencia, nos permite experimentar la pérdida, la muerte, el amor… nos prepara para todas esas cosas de alguna manera. Ese es el valor, esa es la perspectiva desde la que deseo crear».
(Foto – Andy Ford)