DAWN OF SOLACE- Affliction Vortex (Album Review)

Por Eliana Giselle Rodriguez

ALINEACIÓN:

• Drums, guitars, bass and growling vocals: Tuomas Saukkonen
• Clean vocals: Mikko Heikkilä
• Keys: Saku Moilanen
• Guitar: Jukka Salovaara

La emotividad hecha acordes. Así describiría este nuevo y esperado trabajo. Dawn Of Solace fueron, son y serán, un poema a la melancolía.

Dawn Of Solace, nace en 2005 como otro proyecto paralelo del virtuoso, Tuomas Saukkonen (Wolfheart/Before The Dawn), para explorar otra faceta en su carrera. Su música se expresa sobre una fusión entre Gothic metal/ Doom y Death metal melódico.
Para quienes no los conocen, luego de trece largos años de stand by con DOS, Tuomas Saukkonen, decide retomar, sabiamente, su proyecto y lanzar allá por el 2020, el álbum Waves, ya que se habia volcado de lleno a «Wolfheart» como su banda principal. Es aquí cuando aparece la figura del gran Mikko Heikkilä (Kaunis Kuolematon), quien para mí, es una pieza fundamental y la perla que les faltaba. Su voz cristalina es el alma de la banda.

Si bien los proyectos de ambos cantantes, tienen como común denominador, la oscuridad en las composiciones, en donde abundan los sonidos densos y nostálgicos, cada uno de ellos tiene particularidades únicas, elementos que los distinguen o que se destacan más que otros.
Desde su vuelta esperada, con ese discazo que fue Waves, pensé que su imaginación habría culminado y más siendo parte de tres bandas exitosas. Es cierto que aún no vuelven a la altura de sus épocas más memorables, pero sin embargo, la calidad y la creatividad admirable siempre retornan.

Inception
Es una Intro con teclados, estilo gothic.
Que dará como continuación el segundo tema;

Murder.
Amé este tema. Me hace recordar mucho a Swallow The Sun.
Se siente como si la propia melancolia danzara en un río de sombras.
Las melodías son muy pegadizas y te van sumergiendo hacia estados de introspección pura.

Fortress. Otro hit! Se le suman los guturales para potenciar el sonido melódico y luego, estará Into the Ligth a la cual se le vuelven a sumar los guturales, pero la siento una canción más de relleno.

Rival
Y nuevamente, deviene en otro hit! que dan ganas de ponerla en loop!. Las melodías en guitarra y la voz, son todo.
El sonido que más se plasma es gothic, sobre todo con el teclado de fondo, pero también doom, y un sonido melódico, ganchero, muy llevadero, pese a la calma que emana. La batería denota el poderío del track.

Invitation
Retorna la calma y te cautivan. Los growls van a sacarte de a poco del eje.
Toda la parte cantada junto a la melodía, son una fiel muestra de cómo la oscuridad y melancolía puede brindarte, a su vez, luz, paz y calma.
Aludiendo a esto, me hace recordar a un hermoso autor llamado Søren Kierkegaard; quien dedica un libro hacia la melancolía; vista de manera positiva también, como un medio para el desarrollo personal; Desde el autoconocimiento, pudiendo romper con las contradicciones internas, que se producen gracias a la introspección, pudiendo devenir en la posibilidad de una transformación personal… Nada, nerdeada mía aparte, el tema y concepto del álbum me evoca a esto.

Dream
Muy buen tema. La fusión entre metal Melódico con la voz gutural de fondo oscurecen el track. Respecto a Dream como sencillo, Saukkonen ha comentado: «Dream puede no ser el sencillo más típico de DOS, pero el impulso hacia adelante y el ritmo constante de la canción hicieron imposible ignorarlo como una de las elecciones sencillas obvias. Como un tren corriendo a través de la noche y la luna Ilena iluminando la vista».

Perennial
Son 04:15min del tema, en donde abundan los acordes densos estilo doom/death, para luego culminar el álbum con su último track;

Mother Earth
La melodía de la guitarra es muy pegadiza.
La calma aparente, se corta con el dúo de voz limpia acompañada de la gutural. Y la agresividad que protagoniza el tema, pronto se va diluyendo, con un teclado gótico, calmo, que va desapareciendo.

Debo decir que estoy ansiosa de pensar en la idea de verlos alguna vez en la vida en Argentina. Porque se nota en tan sólo una simple escucha, lo disfrutable que va a significar este disco en vivo y en directo. Sigan así muchachos que su «infinita tristeza me hace feliz«! (???).

En el arte de tapa se representa a un hombre admirando (quizá anhelando), la luz resplandeciente de la luna, desde la penumbra…
Su figura, envuelta en sombras, encarna esa opresión emocional que asfixia y al mismo tiempo, que revela la posibilidad de libertad, como si en el mismo peso de la existencia, se ocultara la clave para trascenderla.

La luz lunar, que se observa distante y enigmática, se asoma sobre el abismo, proyectando un destello de esperanza. La mente del hombre, compleja y enredada (para mí) simbolizada como las raíces de un árbol milenario, se despliegan reflejando la profundidad y el misterio de la psique humana.

Dichosos estos tres años de espera. Valieron cada maldito día. Es un disco que se torna poco a poco adictivo, con canciones que te quedan rondando en la cabeza. El sonido calmo y melódico, la garra junto al death y los growls; todo ese conjunto está perfectamente fusionado para tener el ganche suficiente, al punto tal de que por más que se esté conciente de que repiten la fórmula, ello no tenga relevancia.

Este álbum, logra remitirnos a distintas sensaciones y pasajes mentales que van a fundirse en este laberinto emotivo.
El aura oscura y nostálgica que emanan, siempre formarán su sello distintivo, que se encuentra más latente que nunca. Es Arte. El Arte de la melancolía y la aflicción.