SATAN – Earth Infernal (Album Review)

Por Elena Berriel

Sólidos al sublime heavy metal, aún después después de sus tantas idas y venidas: cambios de formaciones y nombres en la banda: desde Satan (1983- 1987), Blind Fury (1985) a Pariah (1988- 1998), regresando en 2013 nuevamente a su original nombre Satan con “Life Sentence» (2013), a la vez contando con la cálida bienvenida de la voz de la banda  Brian Ross, los ingleses han demostrado evolución en su género en cada trabajo.

Siguiendo con su actividad nos traen en este nuevo año a “Earth Infernal”, nuevamente manifestando que la vieja escuela del heavy metal sigue más firme que nunca. Apostando a su mismo estándar, ligados a sus orígenes de la ola de NWOBHM, pero con una evolución importante en su calidad y producción musical desde su regreso. “Earth Infernal” es un disco que se realizó en plena pandemia, y a la vez con la cancelación de giras y shows fue un buen motivo para sentarse a escribir y componer nuevos trabajos.  Un título que combina con los  acontecimientos actuales; COVID, conflictos políticos, etc.  Pero Satan también tiene una mirada más amplia para una situación que se encuentra en segundo plano, gracias a las situaciones actuales, es por ello, que los ingleses tiene mucho que decir del cambio climático y como estamos dejando el mundo realmente.

La dupla de Steve Ramsey y Russ Tippins se encargarán de los solemnes riffs que desarrollarán a lo largo del disco, y es así que comienzan para la apertura de “Ascendancy”. Un track enérgico, con ese gustoso heavy metal ochentero, el cual nos brinda un cálido confort de lo que será el formato de “Earth Infernal» . El single “Burning Portrait” proviene de una  armonía equilibrada entre rock clásico y heavy metal, una atmósfera que se presenta bastante oscura con pasajes influenciados por King Diamond. La original voz de Ross que emprende esa excelente sincronización en el estribillo con el juego de guitarra de la dupla, resultan de un sonido totalmente unísono.

No es un disco conceptual, pero hay temas que están interrelacionados en su narrativa, así como “Ascendancy” que describe la historia de un individuo que se encuentra en la cumbre por su alto poder: podrían estar hablando  de un político, un famoso, rey, etc  y por otro lado “Burning Portrait” narrando el descenso personal de este sujeto . “Twelve Infernal Lords” y “Earth We Bequeath” dos puntos fuertes de «Earth Infernal», excelencias de composiciones musicales con una base muy oscura pero muy genuina de los ingleses, que juegan con más técnica, velocidad y melodía que destaca del resto del disco, y a su vez se relacionan en su narrativa,  donde se concentran en transmitir la realidad que estamos viviendo:  el egoísmo y la desconsideración humana por no cuidar el planeta para el presente y las futuras generaciones.

La intermedia “Mercury’s Shadow” una económica y breve instrumental que sigue fomentando  los destacables riffs que predominan en el álbum , además de ser una transición  para dar paso al comienzo más complejo y tribal, con la vuelta de sus breves bongós, que presentará el disco para “A Sorrow Unspent”, pero esto no durará mucho tiempo, ya que se verán la necesidad de proseguir con el formato de “Earth Infernal”.  El viaje a los ochenta sigue firme y hacia  la cumbre del heavy metal nos posicionan este sector; “Luciferic” y «Poison Elegy», desde su clásicos y contagiosos estribillos que van de la mano de un pegajoso rock clásico, sin desprenderse  de los coros, melodías y donde los riffs y la voz de Ross se sienten como si los años nunca hubieran pasado. Visible en cada unas de sus canciones la base de sus raíces, que en base a esto demuestran que no hay mucho más de ese horizonte en el objetivo de sus composiciones, así lo destacan en “From Second Sight” y “The Blood Ran Deep” que siguen celebrando esta fiesta ochentera; un colapso de dosis de heavy metal de la old school, por lo que constituye una velocidad predominante y con un estribillo muy acertado.

Los años han jugado a favor para Satan, por lo que “Earth Infernal”  nos conmueve a memorar la época dorada de la NWOBHM, cada canción nos abre las puertas a la nostálgica época que nos traslada en este hermoso viaje a través de la firme voz de Ross y su formato musical, que sigue al pie de la letra este género. Un álbum directo, veloz, enérgico, con mucha similitud a su regreso de “Life Sentence” (2013)  y con un sonido mucho más elevado que su anterior disco “Cruel Magic” (2018), pero menos rebuscado en la técnica de sus composiciones instrumentales, por lo que en algunos pasajes del álbum aún sigue deslumbrando la monotonía. Satan sigue celebrando esta fiesta y seguramente por muchos años más, demostrándolo en cada álbum se puede sentir que los años para ellos han sido beneficiosos.   

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• Género: Heavy Metal
• Lanzamiento: 1 de Abril, 2022
• Sello: Metal Blade Records