NARNIA – Ghost Town (Album Review)
por Dan Hayer 🇨🇱
La primera cosa en la que tuve que entrar en razón cuando nos fue revelada la portada de este nuevo álbum hace ya algunas semanas, es que Narnia no parece querer retomar más la figura de Aslan, el mítico león de la saga «Las Crónicas de Narnia» (C.S. Lewis) que era el ícono de la agrupación hasta «Enter The Gate», su quinta producción, lanzada en el año 2006. Precisamente fue en ese año en que descubrí su música, y al año siguiente (2007) fue la banda que más me acompañó con sus ambientaciones y melodías tan especiales durante mi servicio militar, época en la cual fui asimilando su sonido a través de la discografía que tenían hasta aquel entonces.
Volviendo a lo de Aslan; llegué a pensar que se debía a una señal que estos cristianos estaban dando en el sentido de que ya no volverán a ser ese Narnia que se basaba mayormente en lo neoclásico, al menos hasta nuevo aviso, porque ya desde la portada el asunto se percibe diferente, lo colorido de este nuevo arte de tapa (elaborada por Jani Stefanovic) contrasta con las sobrias ilustraciones de todos sus trabajos. Y no, no estoy desconociendo que dicho cambio ya se viene efectuando desde antes, ya que creo que podemos distinguir en estos suecos tres etapas, en un comienzo la neoclásica, luego la progresiva, y finalmente, la del metal melódico, que a mi modo de ver, vienen realizando desde la reunión de la banda y aquel álbum que selló ese momento, titulado simplemente «Narnia» (2016). Desde ahí hasta acá, mi sensación es que han venido de menos a más.
Cuando regresaron con aquel álbum homónimo, debo confesar que me dejaron con gusto a poco, y no porque se trate precisamente de un mal disco, pero el giro sonoro que estaban dando apuntaba hacia algo más simplista, en comparación a lo virtuoso de su sonido desde su debutante «Awakening» hasta el poderoso «Course Of A Generation» (con el uruguayo Germán Pascual reemplazando excelentemente al histórico Christian Liljegren en las vocales). No obstante, en 2018 supieron dar un mejor tratamiento a su música, y eso que «Light In The Darkness» continuaba por esa senda de «melodic metal» que la agrupación está dispuesta a seguir explorando, porque en definitiva, ahora ya tenemos a «Ghost Town» para certificarlo.
Lo primero es entender que Narnia, nunca tuvo el power metal como único foco, de hecho me atrevo a decir que lo «power» que tenían, se daba fundamentalmente por los elementos neoclásicos que imperaban en la formación de su guitarrista Carljohan Grimmark, pero siempre han mostrado aspectos relacionados también al Hard Rock, al AOR, y al Progresivo (tengo esa manía de escribir los subgéneros con mayúscula). Y aun así, estando en pleno conocimiento de todos estos antecedentes, debo decir que este álbum me suena fresco y novedoso.
«Rebel» es el primer contacto que tenemos al darle play al reproductor y no solo eso, se trata del primer adelanto que la banda está presentando. Su pesadéz hardrockera va a ser el primer distintivo, con un Christian Liljegren utilizando una técnica más rasgada de lo habitual, y un buen coro, aunque no sé si tan efectivo y soreprendente como «A Crack In The Sky» de su álbum anterior. Y perdónenme las comparaciones, pero les adelanto que vendrán algunas más en los siguientes párrafos, porque me interesa que quienes siguen a esta gran banda de Suecia puedan hacerse una idea de lo que les comento. Aunque sabemos que las bandas no solo quieren encantar a sus seguidores de toda la vida, sino también alcanzar nuevas audiencias. Ya veremos si Narnia lo logra.
Lo sorpresivo para mí no tardaría en llegar, afortunadamente «Thief» es de esas canciones que lo tiene todo, genera suspenso en las estrofas (las cuales son narradas más que cantadas), tiene un puente que sirve como preparativo para ese tremendo coro que bien pudiese estar en un «Enter The Gate» (álbum que amo, por cierto), y posterior a eso CJ Grimmark se despacha uno de los mejores solos de este álbum. Pienso que poner a esta pieza como tema de apertura, por tener los elementos que les he comentado, hubiera sido un batatazo, pero bueno, lo hecho, hecho está. También tenemos aquí a Liljegren realizando algunos de sus agudos de una manera desgarrada como pocas veces le hemos escuchado. Simplemente un temazo, el favorito de este servidor.
Y si alguno ama lo que hizo esta banda en su álbum debut «Awakening», tenemos aquí a «Hold On», que nos llevará de viaje al pasado, con esta composición en la que hallamos teclados y rítmicas muy en plan «No More Shadows From The Past» o «Time Of Changes«, es decir, con ese aire neoclásico que imperaba en los 80s y 90s. Luego aumenta un poco la cadencia con la energía de «Glory Daze», que se configura sumamente agradable de principio a fin gracias a su optimista melodía.
«Descension», la más extensa en duración de este listado, emerge con todo el misticismo de las teclas comandadas por Martin Harenstam, para que luego la voz de Liljegren nos deleite con una interpretación intimista, en tanto que el bajo de Jonatan Samuelsson se percibe con más cuerpo que nunca. La producción de esta placa es de primerísimo nivel, Narnia en eso nunca decepciona. Ojo al interludio, que es la sección instrumental más prolongada del disco. El ambiente se vuelve variado con los primeros acordes de «Ghost Town», la pieza que intitula al álbum es curiosamente una de las más simples, pero no por eso menos efectiva.
En un plan mas denso, y con la voz de Christian bastante en frente de todo, «Alive« tiene ese pulso de media marcha que se ve levemente superado por «Modern Days Pharesees», pero ambas hacen de esta fracción del disco el tramo más sombrío en cierto modo, pero en esta última Harenstam proporciona unos pasajes de piano en verdad hermosos, a la par del brillante desplante guitarrero de Grimmark.
Llegados a esta parte, tenemos que seguir reconociendo lo bien que se le da a esta banda baladas como «Thank You» o «The War That Tore The Land» (que tuve la dicha de presenciar en vivo cuando nos visitaron en Chile el 2019 junto a Stryper) de álbumes anteriores, y «Out Of the Silence» es la que pone esa nota de balada otoñal en esta ocasión, con sintetizadores aportando una atmósfera espacial y moderna a una interpretación majestuosa del carismático Christian Liljegren, y es en ese despegue tipo Vangelis, que escuchamos la emblemática oración del «Padre Nuestro», que Jesús de Nazaret enseñó en algún momento a sus discípulos, para culminar con voces épicas y sacerdotales cantando amén hasta el final de este tema.
Pero amigos, como un aviso de que el Power Metal persiste en los genes de Narnia, una pieza totalmente power, progresiva y malmsteeniana es la encargada de bajar el telón con total distinción. «Wake Up Call» es el mensaje final que nos dejan estos cristianos que con toda claridad y franqueza exponen su fe, sin esconderla bajo disfraces humanistas ni cosas raras, han mantenido firmemente sus convicciones y las presentan con música sublime como esta partitura, donde el reloj tamboril del quinteto escandinavo, Andreas Johansson, nos marca con gran precisión los cambios de pulsación mientras juguetea con esos platillos que siempre le dan un aporte distintivo a las percusiones de esta banda.
El recorrido por este pueblo fantasma nos deja un entramado melódico que supera, desde mi humilde punto de vista, a sus dos trabajos anteriores. Con un sonido mas cálido de lo acostumbrado, y unas guitarras mas engrosadas y rasgadas de lo habitual, esta obra de Grimmark, Liljegren, Johansson, Samuelsson y Harenstam, de seguro escalará en el listado de varios. No es power metal, no es progresivo, no es neoclásico, ni es AOR; es Narnia, y para bien o para mal, nada suena como Narnia!
NARNIA - Ghost Town
El recorrido por este pueblo fantasma nos deja un entramado melódico que supera, desde mi humilde punto de vista, a sus dos trabajos anteriores. Con un sonido mas cálido de lo acostumbrado, y unas guitarras mas engrosadas y rasgadas de lo habitual, esta obra de Grimmark, Liljegren, Johansson, Samuelsson y Harenstam, de seguro escalará en el listado de varios. No es power metal, no es progresivo, no es neoclásico, ni es AOR; es Narnia, y para bien o para mal, nada suena como Narnia!Pros
- Producción con un sonido de primera, cada instrumento se percibe de manera limpia y clara
- La interpretación de Christian Liljegren muy certera, tanto para canciones poderosas como también para otras de carácter introspectivo
- La ejecución instrumental de cada uno de los músicos es sobresaliente
Cons
- Se extrañan algunas canciones mas aceleradas que amplíen el dinamismo del álbum
- Carljohan es un guitarrista tan espléndido que los solos se hacen demasiado cortos
- El orden de las canciones a veces puede hacer una gran diferncia en la percepción de un trabajo, no es un error habiual en Narnia