ELVENKING – Reader Of The Runes – Rapture 🇮🇹 (Album Review)

Por Michael Prado

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Todos tenemos agrupaciones con las que crecimos o las que buscamos en nuestros inicios escuchando este bello género musical, con el propósito de hallar más música que se pareciera a lo que nos trajo directamente a iniciar esta senda melómana.  Al menos en mi caso fue así, puesto que, tras descubrir este mundo maravilloso a través de Mägo de Oz, lo primero que hice fue buscar bandas que hicieran música similar a ellos, ya saben, Heavy Metal que tuviera también el aporte de violines, flautas, y que contara historias épicas y tal.

En ese camino hace ya 18 años, tuve la dicha de encontrarme con agrupaciones que hoy forman parte muy importante de mi vida, como Saurom, Lándevir, Ars Amandi, y una muy especial que se formó en Italia, los cuales nunca han negado el aporte que los liderados por el siempre polémico Txus di Fellatio han contribuido en forma de influencia importante para la labor artística que entretejen con cada nuevo lanzamiento.

Cuando los conocí en el 2006, ELVENKING, agrupación italiana de Folk/Power Metal asentada en Friuli-Venezia Giulia, tenía en su haber únicamente 3 álbumes de estudio, y apenas habíase dado el lanzamiento de “The Winter Wake” (2006), disco que, hasta el día de hoy, sigue siendo mi favorito de los que han creado.

Los años han pasado, y con ellos, 7 discos más llegaron, hemos visto cómo la banda ha evolucionado en el camino, adoptando estilos dispares a lo que fue su arranque tan festivo y evocador de leyendas de ensueño, pasando a inclusive incorporar sonidos más afines al Mallcore en su propuesta (esto lo vimos con el polémico “The Scythe” (2008), álbum que muchos amamos pero otros muchos repelieron con todo su ser), las leyendas fueron archivadas en pro de los relatos de desamor (por los cuales el cantante y uno de los principales compositores del grupo, Davide “Damnagoras” Moras, fue criticado de “volverse emo” en el camino), hasta que finalmente, a partir del majestuoso “The Pagan Manifesto” (2014), los mitos, leyendas, historias épicas y canciones festivas, volvieron a ser parte de la historia de esta agrupación tan icónica en este subgénero.

Hoy día, además de Damna (quien también canta en Hell in the Club y tuvo un proyecto alterno llamado Leprechaun), el grupo es complementado por su siempre fiel compañero de viaje y fundador de la agrupación, el guitarrista Federico “Aydan” Baston, el también guitarra Mattia “HeadMatt” Carli (cuyo talento a las 6 cuerdas también está disponible en Chaos Factory, Feline Melinda y Headcrush, aparte de un aporte pasado en Bullet-Proof), el bajista Alessandro “Jakob” Jacobi (que además usa su instrumento en Moonlight Haze y The Black Lodge, aparte de haber sido miembro de Tragoedia, Trioxia, Burning Black y el tributo a Pantera llamado Scarface), el baterista Simone “Symohn” Morretin (que hace retumbar su instrumento también con Shadygrove, los ya citados previamente Scarface, y que fue parte de Time, Revoltons y conciertos de Sinheresy) y el violinista Fabio “Lethien” Polo (que también crea melodías para All My Faith Lost… y Shadygrove).

En el año 2019, Elvenking decidió iniciar lo que llegará a ser una trilogía al ser completada, que lleva por título “READER OF THE RUNES”.   Dicha saga arrancó en dicho año con su álbum “Reader Of The Runes – Divination”, en donde el grupo seguía manifestando su lado más afín a las historias paganas, de brujas, hechiceros y demás usanzas de esa estirpe.  4 años pasaron, siendo éste el período donde estos italianos nos hicieron esperar más por un nuevo disco, siendo dicha por un nuevo larga duración espera finalmente rota en lo que será este 28 de abril del año en curso (aunque, previamente, tuvimos por parte del grupo, en el 2020 un cover de la canción “No Prayer For The Dying” de Iron Maiden y un sencillo original llamado “The Moon And The Magic” en el 2021).  La continuación de esta trilogía llegará por intermedio de AFM Records bajo el nombre de “READER OF THE RUNES – RAPTURE”.

Al abrigo de un sonido ambiental que nos recuerda el estar aparcado frente al mar, llegando poco a poco la guitarra, sonidos orquestales, entrada de coros épicos, y finalmente la aparición de la banda como tal, el disco empieza su andanza con “Rapture”, la cual, si me permiten decirlo, me trae más semejanzas a la era de Elvenking aparcada entre los años 2010 y 2012, antes que todo aquello que más los ha distinguido, puesto que, pese a que la lírica que hace apelación a brujerías y todo eso, la musicalización me parece más cercana a lo que tuvimos con “Red Silent Tides” (2010) y “Era” (2012), no tan festiva sino más melancólica y reflexiva.  En lo personal, para ser un número de apertura, la siento algo desabrida a mi gusto, comparada con otras que han tenido en el pasado.

Contrario a lo que vimos en esta abrediscos, “The Hanging Tree” sí trae esa polenta y energía que uno esperaría de un número que dé inicio a un álbum, avanzando con un tempo que arrasará con lo que tenga a su paso, un puente y estribillo sumamente pegadizos y melodías en los instrumentos que nos invitarán a danzar al son que marcan.  Dios, ese espíritu que hemos tenido en números del pasado como la hermosa “Pagan Purity” que abrió el siempre reverenciadísimo “Heathenreel” (2001), la festivísima “Elvenlegions” del fenomenal “The Pagan Manifesto” (2014) o la también genial “The Horned Ghost And The Sorcerer” que viene en “Secrets Of The Magick Grimoire” (2017).

Con una cadencia e ímpetu más aventureros en su estructura sonora, entra en acción “Bride Of Night”, donde tendremos inclusive voces guturales brindadas por la contribución vocal que viene por parte de la cantante sudafricana Heike Langhans, brindándole una vibra más oscura a la letra de esta canción tan brillantemente bien labrada.  Podemos notar en esta canción que Lethien al inicio de este disco se ha enfocado más en elaborar melodías de fondo que algo parecido a solos por su parte.

Ahora toca el momento para que tanto Aydan como HeadMatt derrochen energía de sus guitarras, con el advenimiento del plus de energía que les inyectará Symohn con el retumbar de la batería dentro de lo que significa la cuarta canción de esta placa, intitulada “Herdchant”, que me lleva de regreso a algunos de los mejores momentos que tuvimos en su maravilloso discazo del 2006, inclusive teniendo momentos melódicos donde intervienen con gran poderío épico el resonar de gaitas y flautas unidas al son armónico que eleva el sentir guerrero.  Sin dudas un número bastante heavy y nutrido de esa fuerza que anhelamos por parte de músicos así.

Bien, si extrañábamos una labor más frontal de los violines (algo que ha sido parte importante, no solamente en Elvenking, sino en cualquier banda que se regodee de ser icono de Folk Metal), lo obtendremos en la emocionante “The Cursed Cavalier”, con un plus bastante llamativo de tener resaltando más la labor que Jakob realiza en el bajo, y mucha, mucha melodía en forma de solos por parte de Aydan, mientras el canto infalible de Damna nos lleva de la mano en la trágica historia del protagonista de esta pieza, que cuenta con uno de los mejores y más alegres estribillos del redondo.

Si un viaje a las zonas boreales se merece un soundtrack debido a lo intenso del viaje, pues déjenme decirles que la pieza “To The North” es bastante adecuada, debido a la potente labor que hace Symohn con sus tambores, los guturales de Damna y Aydan, y la energía que desprende el resto del grupo a lo largo de la pieza, brindándonos otro épico y fenomenal despliegue de energía épica, muy afín a lo que se hace más al norte de Italia, donde agrupaciones como Finsterforst, los anteriormente reseñados Heidevolk, entre otros, crean arte de gran potencia y epicidad en estas lides.  Aparte, Aydan sigue demostrando con gran valía en sus solos por qué es el único fundador del grupo que permanece tras 26 años.

Batería y bajo dan con potente sonoridad arranque a “Covenant”, una pieza que, en su intención, me recuerda bastante lo que tuvimos en “The Scythe” hará 15 años atrás, aunque claro, no deja de tener bastante de lo que nos brinda la banda actualmente.  Cual si fueran cantos oscuros de una hermandad oscura, la voz de Damna (acuerpada en varias estrofas por coros que suenan bien poderosos) apuesta por tonos más graves en su interpretación para esta pieza (compuesta en un La Menor que no falla para construir números de estirpe más siniestra).

Otro momento para ponernos en una sintonía más cercana a la melancolía e introspección nos llega transformado en la canción llamada “Red Mist” (sí, un nombre que aparte evoca en cierta forma a su hermoso disco del año 2010).  Ésta de manera inequívoca pasará a ser parte de ese repertorio que tiene el grupo para desahogar penas si así se requiere y agarrar energías para afrontar el camino, como lo demuestra el desarrollo de la pieza, que en su intencionalidad nos invita a levantar la cabeza y seguir adelante.

Qué lindo es disfrutar de melodías folkish al inicio de una canción, como sucede al aparecer en escena “Incantations”, previo al despliegue más magno y potente del grupo (donde, además, para los amantes del bajo, se puede distinguir nuevamente con mucha propiedad la labor de Jakob, gran fichaje que el grupo hizo en 2012, cuando su histórico Gorlan decidió bajarse del barco).  Amo este tipo de canciones que suenan tan grandilocuentes, épicas, con mucha melodía Folk, buenos riffs de guitarra y un estribillo que engancha de una manera altamente contagiosa.  De los highlights que fijo harán delicias en vivo entre los fans.

“An Autumn Reverie” llega con una energía arrolladora que rompe con ese bello arranque brindado por las melodías del violín de Lethien, para guiarnos en un número que, como su nombre lo indica, es otra pieza de ensueño dentro de este brillante álbum, con momentos bastante Power Metaleros, como ese estribillo que nos invitará a volar patadas entre el público (si tan sólo los llegáramos a ver pronto en tierras latinoamericanas, que les ha faltado conquistar).

Todo debe acabar, y es algo triste, pero así es una de esas leyes inquebrantables de la vida, sobre todo cuando se trata de música, y el final de este álbum lo dicta la maravillosa e imponente “The Repentant”, que será un derroche de energía, magia, epicidad, misticismo y melodías de inicio a fin, que, aparte, ¡vaya fin explosivo tiene esta canción, donde Elvenking parece llegar a convertirse en alguno de sus pares que hacen Folk Metal más rudo en Europa Central, apelando a blast beats cargados de melodías espectaculares!

Elvenking sigue siendo una apuesta segura para los que quieran pasar un rato pletórico de encanto y magia, cosas que han logrado empacar con mucha fuerza, empeño y pasión en cada una de las 11 canciones que componen lo que será su undécimo álbum de estudio, que nos deja con las ganas ardientes de saber cómo finalizará esta trilogía “Reader Of The Runes”, pues ésta ha sido una muy digna segunda parte.  Quizás me hizo falta una canción más larga de al menos 7 minutos, pero no creo que eso sea excusa para hacerle cara fea a este muy bien logrado álbum.

Recientemente en nuestro canal de YouTube se le ha realizado una entrevista a Aydan. Te la compartimos: